Tragedia

Muere de un puñetazo letal un boxeador de 23 años que peleaba por un premio de 18 euros

Su familia denuncia la falta de seguridad en los combates amateur

Joao Victor Penha
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Conmoción en el mundo del boxeo. Un joven boxeador aficionado ha muerto en el hospital tres días después de sufrir un golpe mortal en la cabeza durante un combate en Brasil. Joao Victor Penha, de 23 años, estaba luchando por un premio de 18 euros en una pelea en la que su familia le rogó que no participara por temor a su seguridad. Y apenas 90 segundos después de iniciada la pelea fue noqueado cuando su oponente le dio un puñetazo directo en la barbilla.

Joao Víctor dominaba la pelea antes de sufrir el golpe fatal. El boxeador herido fue atendido por los socorristas y recuperó el conocimiento. Pero su estado empeoró rápidamente y tuvo que ser trasladado al servicio de urgencias de un hospital. Los medios locales afirman que el devastador puñetazo le dejó un traumatismo craneoencefálico severo.

Joao Victor fue trasladado en condiciones críticas el día después de la pelea el pasado 8 de octubre, pero el 10 de octubre se producía su muerte, según han publicado ahora los medios locales. La policía de Brasil ha abierto una investigación sobre el combate.

En el comunicado oficial del hospital se puede leer: "Después de realizar los exámenes, el paciente fue declarado con muerte cerebral, lo que también provocó un paro cardíaco".

“Estas peleas son un absoluto absurdo. Ni siquiera sé qué decir, especialmente después de la tragedia con mi hermano. No queríamos que participara. Todos estábamos muy preocupados; mi madre le pidió que no peleara, intuyendo que podía pasar algo más grave. Hablamos con él, pero nos pidió apoyo y entonces no tuvimos otra opción" ha declarado su hermana a los medios.

“El ganador de la pelea recibiría 18 eros y el perdedor unos 10. Desafortunadamente, la vida de mi hermano se perdió por esta cantidad”, añadió.

Más allá de su pasión por el boxeo, Joao Victor era responsable de recursos humanos en un hotel en el noreste de Brasil, y vivía en Jijoca de Jericoacoara con su familia.