MotoGP

Pecco Bagnaia asusta pero Marc Márquez no se arruga

Se acaba la pretemporada de MotoGP con Bagnaia al mando y con Marc progresando con la Ducati y buscando sus límites

Marc Márquez, en el test de Qatar
Marc Márquez, en el test de QatarEuropa Press

Hay muchas ganas de comprobar qué será capaz de hacer Marc Márquez con la Ducati del Gresini Team, pero hasta el fin de semana del 8 al 10 de marzo no se podrá comprobar de verdad, cuando en Qatar se levante el telón de la temporada 2024. De momento, solo se pueden hacer elucubraciones con los tiempos de los test de pretemporada, que precisamente se terminaron este martes en Losail, el mismo escenario donde empezará todo. No se pueden sacar grandes conclusiones, aunque sí está claro que Marc empieza a soltarse con su nueva moto. Que se siente cada vez más cómodo y se ve capaz de ir buscando los límites de su Ducati. La muestra es que justo al final de la última jornada llegó la primera caída del de Cervera con sus nuevos colores. No se cayó en Valencia, tampoco en Malasia ni en la jornada uno de Qatar. Pero ayer sí que se fue al suelo, sin consecuencias, cuando estaba buscando una vuelta rápida.

Una buena señal, porque significa que se siente lo suficientemente cómodo para ir acercándose a los límites y comprobar hasta dónde puede apretar. Decía el día anterior que le costaban sobre todo las curvas rápidas, donde más confianza hay que tener y se ve que está progresando.

Terminó Marc con el cuarto mejor registro, solo por detrás de las dos Ducati oficiales y de Aleix Espargaró. Y eso que no era un día fácil para destacar en la tabla de tiempos, porque hasta once pilotos fueron capaces de rebajar el 1:51.762, el tiempo de la «pole» de récord que hizo Luca Marini en el GP de Qatar de 2023. A pesar de lo que apretaron todos, y de que en MotoGP se va a ir más rápido que nunca este curso, ahí estaba Márquez, con su Ducati del año pasado, en un equipo satélite y pequeño, pero afilando el cuchillo para lo que viene.

En Gresini están convencidos de que va a ir progresando con el paso de los meses, cuando pueda adaptar del todo su estilo a la nueva moto. Para empezar fue la tercera mejor Ducati, la primera de un equipo no oficial y por delante de su hermano Álex, con más experiencia en esa máquina.

Marc había tenido problemas con marcar el tiempo a una vuelta, pero parece claro que ayer dio un gran paso en este sentido. Él insiste en que la gente no se emocione mucho, que viene de cuatro años muy complicados y que de momento le basta con intentar estar cerca de los primeros. Algo que no es fácil viendo el nivel de Bagnaia, vigente campeón del mundo y claro dominador de las pruebas de pretemporada. Pecco ha volado literalmente con la Desmosedici y un 1:50.952 en Losail que es directamente de locos. Fue el único que bajó de 51 y en cuanto alguien se ponía primero aparecía el italiano para marcar territorio.

La nueva Ducati GP24 es mejor que su antecesora y está dando rendimiento desde el principio, algo que no había sido tan sencillo de conseguir otras temporadas. Claramente Pecco y su Ducati son el dúo a batir en 2024, con un dominio de la marca italiana tan abrumador como el curso pasado. Las concesiones de reglamento que tienen Yamaha y Honda todavía no han hecho tanto efecto como para ser rivales. Marc va a intentar ser el enemigo en casa de las Ducati oficiales.