Tenis

Alcaraz reacciona ante Kuhn para pasar a octavos de Hamburgo

El murciano, en su vuelta a la actividad después de Wimbledon, sobre tierra batida, tuvo que remontar para vencer por 3-6, 6-1 y 7-6 (7/3) en un partido que jugó mal

Carlos Alcaraz pasó la primera ronda de Hamburgo
Carlos Alcaraz pasó la primera ronda de HamburgoJULIÁN PÉREZAgencia EFE

La reacción de Alcaraz tuvo que ser rápida (victoria por 3-6, 6-1 y 7-6 [7/3]), porque su estreno en Hamburgo se había complicado, y mucho. Enfrente estaba Nicola Kuhn, no hace tanto promesa del tenis español y que ahora juega como alemán. De Alemania es su padre y de Rusia su madre, pero desde los tres meses vivía en Torrevieja y se hizo español en 2016, y en 2017 disputó la final de Roland Garros júnior. Esa progresión se cortó en parte porque llegaron las lesiones y desde 2021 Kuhn volvió a “ser” alemán. Es el 259 del mundo y está en Hamburgo con una invitación, pero no tardó en demostrarle al número seis del mundo que debía llevar cuidado. Después de salvar tres pelotas de break, el germano logró él la rotura al juego siguiente. Fallaba Alcaraz más de la cuenta, miraba a su palco y se preguntaba: “¿Por qué?”. No entendía demasiado lo que estaba sucediendo.

Y su rival se le echaba encima desde el resto. Agresivo con ese primer golpe, cuando Carlitos caía en la pista después de hacer el servicio, la pelota ya había vuelto y no podía responder. Él, en cambio, no encontraba la manera y por eso el primer set se le escapó. Desde el break, mandó Kuhn en todo momento.

Se esperaba que el tenista que está impresionando al circuito esta temporada apareciera, y lo hizo. No suele perder los nervios el murciano en pista y empezó a ajustar sus golpes y a descontrolarse menos. Con el revés más sólido y la derecha más contundente, o tirando para arriba con el revés y de arriba abajo con potencia con la derecha, cogió carrerilla en el segundo set para tranquilizar el marcador.

Pero Kuhn, en el primer cara a cara de su vida ante un “top 10″, no se hundió. Recuperó el norte y volvió a hacer partido. Amenazó con un par de roturas al comienzo del tercer parcial. Las salvó el español y lo celebró sacando el puño. No las tenía todas consigo, ni mucho menos. El alemán, entonces, pidió la presencia del fisioterapeuta, que le trató y le vendó el muslo derecho. A partir de ahí ya le costó plantar batalla en los intercambios. Le costaba moverse, estaba muy pendiente de su pierna, que se tocaba constantemente. Decidió arriesgar y jugar a tiros: ganador o fuera. Y resistió mucho, hasta el tie break.

A Carlitos le costó centrarse. Tampoco es fácil medirse a un rival limitado. Se podía haber liado cuando se vio 5-4 y 6-5 abajo, pero no tembló con el servicio. Sacó adelante una jornada en la que en líneas generales no jugó nada bien. El español es el primer cabeza de serie de Hamburgo, pero las curvas no tardarán en llegar. Ya en octavos se mide al ganador del duelo entre el veterano serbio Krajinovic y el argentino Baez, que viene con ritmo después de jugar la final de Bastad y habiendo derrotado a jugadores como Fognini, Davidovich, Thiem y Rublev.