Finanzas

La pandemia impulsa la revolución en la banca

Las entidades financieras, amenazadas por la irrupción de las grandes tecnológicas y las «FinTech», según Funcas

Los bancos tradicionales deben competir con las nuevas entidades nativas digitales, como los neobancos o las FinTech
Los bancos tradicionales deben competir con las nuevas entidades nativas digitales, como los neobancos o las FinTechDreamstimedreamstime

La pandemia ha cambiado mucho el modo de relacionarnos con las entidades financieras y la forma en la que éstas prestan sus servicios. Las aplicaciones móviles para realizar operaciones, o la caída de los pagos en efectivo, es el nuevo panorama que ha dejado la COVID-19.

La banca ha conseguido en un tiempo récord acelerar su digitalización, especialmente la española. El obligado cierre de sus oficinas el pasado mes de marzo las condujo a apostar de una manera aún más decidida por los canales digitales para prestar servicio a sus clientes, algo que le ha servido para ganar millones de clientes digitales que coinciden en su mayoría en valorar positivamente esta revolución, según se desprende de varios estudios, como los de HelpMyCash.com, D-Rating y ahora el VI Barómetro de Innovación Financiera publicado por Funcas. Así pues, la valoración de los usuarios del grado de innovación de las entidades ha aumentado desde el inicio de la crisis sanitaria en un punto, hasta situarse en una nota media de 7,7 sobre 10. Una mejora ligada al esfuerzo de diversificación de la oferta digital y del acceso a las entidades. Tras los primeros pasos dados en torno a 2015, éstas ofertan, apoyadas en el uso de datos, decenas de servicios digitales «ad hoc» y personalizados. En este sentido, un 96% de los usuarios afirma que su banco dispone de productos alternativos a los tradicionales frente al 89% que lo señalaba al inicio de la pandemia.

También los directivos valoran de manera positiva el grado de digitalización de sus compañías, con un 6,6 de media, mientras que en el período precovid la valoración era un 5,9. Un destacable cambio provocado por la pandemia es la reducción de la preferencia por el uso de efectivo para pagos en el comercio, aunque aún no puede precisarse qué parte de ese cambio es coyuntural y asociado a las exigencias de distancia social y qué parte será permanente.

Banca online

La banca online ha adquirido una enorme relevancia desde el inicio de la pandemia, relevancia que crece y se consolida. En la actualidad, el 73% de los encuestados por Funcas dice acceder semanalmente a la banca online de su entidad cuando en fases anteriores era el 68%, mientras que solo un 3,37% de los encuestados acude de manera semanal a la sucursal de su banco y casi tres cuartos de ellos acuden entre una y menos de una vez al año.

Asimismo, la disposición a trabajar con los bancos digitales como proveedor financiero principal aumenta 10 puntos porcentuales desde momentos previos a la COVID-19, situándose en un 43%. Esto ha supuesto que las grandes empresas tecnológicas, las conocidas como «BigTech» y las «FinTech» (bancos 100% digitales) logren posicionarse como los principales competidores para los bancos tradicionales, según opina un tercio de los directivos de las entidades financieras españolas.

Google, Amazon y Apple se mantienen como las «BigTech» preferidas por los usuarios para abrir una cuenta corriente si esto fuera posible, si bien menos del 50% estarían dispuestos a trabajar con ellos. Amazon y Google son las que suponen una mayor amenaza para el sector, según los gerentes de las entidades financieras en España, por delante de Apple y Facebook. En palabras de Santiago Carbó, director de Estudios Financieros de la Fundación Funcas, «el gran peligro de las ’'BigTech’' para la banca tradicional es su capacidad de manejar datos, gracias a la inteligencia artificial, datos que no están obligadas a compartir, a diferencia de la banca tradicional, lo que sitúa a esta última en una clara desventaja. Es una de las grandes protestas del sector». De hecho un 58% de los directivos cree que las «FinTech» (bancos 100% digitales) poseen ventajas regulatorias frente a los bancos tradicionales y para un cuarto de los directivos, suponen una amenaza. Han crecido en relevancia como competidores en cinco puntos básicos desde el periodo pre-COVID. Alrededor de un 30% de los directivos percibe que la estrategia frente a las «FinTech» es de colaboración y un 60% cree que existe un enfoque mixto de competencia y colaboración.

Cultura financiera

En cuanto al conocimiento de los términos «FinTech» y «BigTech», a día de hoy, siguen siendo desconocidos para la mayoría de la población española. No obstante, el 60% de los encuestados que afirma conocer estos términos sabe las diferencias entre ambas. Una cifra que ha aumentado, respecto a la primera fase de la pandemia, en 14 puntos porcentuales. En cuanto al conocimiento de otros términos ligados a la innovación en el sector financiero se han producido leves variaciones durante el último periodo. Los términos bitcoin y criptomonedas siguen siendo los más conocidos (más del 80% de los usuarios han oído hablar sobre ellos), mientras que Blockchain, Ethereum y Sandbox Financiero son todavía desconocidos por gran parte de la población encuestada. También se ha preguntado a los directivos de entidades financieros por el conocimiento del “Sandbox FinTech” –iniciativa regulatoria aprobada recientemente como “banco de pruebas” para lanzar innovaciones «FinTech» y estimar las garantías y exigencias regulatorias asociadas a las mismas–, y un 84% dice que ha oído hablar de él, pero más de la mitad no conoce en qué consiste su aplicación.

Mientras que el número de usuarios que ha contratado un préstamo o abierto una cuenta en el banco de manera totalmente digital es similar al de fases anteriores, se aprecia un claro aumento en el uso de las aplicaciones móviles para pagar en el comercio o transferir dinero, llegando, respectivamente, al 63% y 75% de los encuestados frente al 55% y 62% anterior. Asimismo, durante estos más de diez meses de pandemia se ha afianzado el uso de tarjetas y otros medios electrónicos como medio de pago. Su utilización llegó a avanzar hasta 20 puntos en el primer confinamiento respecto a la situación precovid. En el otoño, con los rebrotes, el aumento ha sido de 15 puntos respecto a la situación anterior a la pandemia, a falta de los datos de esta tercera ola.

Expectativas de los banqueros

En un contexto económico como el actual, las expectativas de los gestores de la banca empeoran. Solo un 16% de los directivos son optimistas a corto plazo, mientras, en un horizonte temporal a 5 años vista, las expectativas son positivas para dos tercios de los encuestados. Con el transcurso de la pandemia, la situación económica del país se ha convertido en la principal preocupación para los gestores por encima de la transformación digital y del reto de aumentar la rentabilidad. En un plazo a 3 años vista, la transformación digital y la entrada de nuevos competidores se consideran los principales desafíos, según el 51% de los directivos encuestados.

Nuevo reto del sector: formar a sus profesionales

La tecnología está provocando una transformación total del mundo financiero, afectando, por un lado, a la relación con el cliente y, por otro, dando lugar a la aparición de nuevos modelos de negocio. Para analizar, adaptarse y comprender este nuevo modelo de banca digital la formación es crucial, y las entidades y centros formativos han acelerar sus áreas específicas. Por ejemplo, el Instituto de Estudios Bursátiles (IEB), que ha adaptado su histórico máster en Finanzas a formato online, dando lugar al Master Online en Finanzas y Banca Digital.
«La banca digital se ha convertido en una oportunidad de empleo para el talento junior que busca trabajo y en una oportunidad de reciclaje para el talento senior», señala Joaquín Danvila, jefe del departamento de desarrollo digital del IEB. Este programa pretende aportar una visión global de la transformación digital en todo el panorama empresarial para poder analizar en profundidad los cambios que se están generando y se esperan en el sector financiero. El claustro está compuesto por profesores vinculados a las principales entidades financieras y mercados y que enseñarán las herramientas y procesos para que los empleados de banca puedan seguir siendo competitivos en este nuevo ecosistema financiero.
Esta iniciativa, que dará comienzo en marzo, va dirigida sobre todo a empleados de banca, profesionales con perfil económico-financiero, consultores estratégicos y tecnológicos, emprendedores, tecnólogos con interés en el sector financiero o profesionales interesados en actualizar sus conocimientos.