Indra es la segunda compañía más sostenible de su sector, según S&P

Indra, hacia la neutralidad en carbono para liderar la transición «verde»

Reconocida como la tecnológica española líder en reducción de emisiones por el Financial Times, quiere descarbonizar su cadena de suministro en 2050

Los efectos del cambio climático son cada vez más claros. Afortunadamente, los esfuerzos para abordar el calentamiento global por parte de países, instituciones y empresas también comienzan a intensificarse para alcanzar el objetivo de la ONU de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero para limitar el incremento de la temperatura global a 1,5 grados.

Un buen ejemplo de este compromiso lo ofrece Indra, reconocida como la segunda empresa más sostenible del mundo de su sector, según el anuario de sostenibilidad de S&P. La tecnológica ha sido incluida recientemente en la lista de las 300 compañías europeas que más han reducido las emisiones de gases de efecto invernadero entre 2014 y 2019, elaborada por el Financial Times y la compañía de investigación Statista, en la que se sitúa como la tercera empresa europea del sector tecnológico y como la primera tecnológica española en reducción de emisiones.

Tras este logro, la compañía sigue avanzando hacia la neutralidad en carbono y, para ello, se ha fijado unos ambiciosos objetivos para reducir el 50% de las emisiones de gases de efecto invernadero en 2030 y conseguir en 2040 las cero emisiones, según los objetivos basados en ciencia (SBT) de alcance 1 y 2, que se refieren, fundamentalmente, a las emisiones derivadas del consumo de combustibles fósiles y de electricidad en sus centros de trabajo. Estos objetivos toman 2019 como año base, lo que supone una gran exigencia por el plazo para lograrlos.

Pero el empeño de Indra en la consecución de los objetivos de Cambio Climático de la ONU va un paso más allá, ya que se ha fijado objetivos a largo plazo y ha ampliado su perímetro al denominado alcance 3, tras un análisis exhaustivo de las fuentes de emisión más relevantes de su cadena de valor. Así, la empresa se compromete a ser totalmente neutra en carbono en 2050, trasladando esa exigencia a toda su cadena de suministro.

Todos los objetivos que Indra se ha marcado son globales, lo que supone una complejidad añadida debido a los cerca de 200 centros de trabajo en más de 40 países en los que la compañía está presente, a sus cerca de 50.000 empleados y a los más de 7.000 proveedores con los que cuenta, lo que dificulta, especialmente, la gestión de las emisiones de alcance 3 de la huella de carbono.

«En Indra nos hemos marcado unos ambiciosos objetivos de reducción de emisiones basados en la ciencia para situarnos a la vanguardia de la transición hacia una economía neta en carbono. Queremos ser el aliado tecnológico en sostenibilidad de nuestros clientes y esa aspiración empieza por minimizar nuestra propia huella de carbono, además de desarrollar nuevos productos y servicios que ayuden a nuestros clientes a ser más sostenibles en su actuación», explica Manuel Ausaverri, director de Sostenibilidad, Innovación y Estrategia de Indra.

¿La fórmula?

Para conseguir alcanzar estas exigentes metas, Indra tiene previsto poner en marcha diferentes iniciativas para implantar medidas de eficiencia energética, incrementar el uso de energía verde, realizar compras con menor huella de carbono y promover una movilidad más sostenible, entre otras.

La iniciativa SBTi a la que Indra se ha adherido, que impulsan el Pacto Mundial de las Naciones Unidas, el Carbon Disclosure Project (CDP), el Instituto de Recursos Mundiales (WRI) y el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF), tiene como objetivo aumentar el compromiso de las empresas con la gestión sostenible y promover soluciones más ambiciosas frente al cambio climático y la transición a la economía baja en carbono.

Los objetivos generales y más concretos para la reducción de emisiones que Indra le ha presentado serán evaluados y validados de forma independiente por los expertos técnicos de SBTi, de acuerdo con lo que los científicos climáticos dicen que es necesario para cumplir los objetivos del Acuerdo de París. La inminente aprobación de estos objetivos, convertiría a Indra en una de las primeras empresas del Ibex 35 con sus objetivos basados en la ciencia aprobados por el SBTi. La compañía tendrá que reportar, además, anualmente cómo avanza hacia los objetivos marcados.

Tecnología, aliada clave

«Desde Indra contribuimos a la persecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de la ONU de dos maneras: con nuestras políticas corporativas y compromisos que voluntariamente adquirimos; y con lo que hacemos, con nuestras soluciones y servicios», afirman fuentes de la compañía.

Y es que la empresa desempeña un papel clave en la acción global por el clima y en la transición energética a través de su oferta en ámbitos como la eficiencia energética, la reducción del impacto ambiental de las ciudades, la movilidad sostenible o la prevención y mitigación de los efectos del cambio climático, entre otros muchos. A través de su tecnología, Indra ayuda a gobiernos y empresas a ser más eficientes y sostenibles.

Los nuevos objetivos de reducción de emisiones medibles y basados en la ciencia de Indra son una de las acciones previstas en su Plan Director de Sostenibilidad 2020-2023, que pretende reforzar el modelo de gobierno responsable de Indra, potenciar su tecnología con impacto en el desarrollo sostenible y contribuir activamente a combatir el cambio climático.

Las iniciativas climáticas del Plan Director de Sostenibilidad están encaminadas, fundamentalmente, a cumplir con estos exigentes objetivos SBT y a desarrollar una oferta específica de sostenibilidad que incluya nuevas soluciones y servicios que contribuyan a mitigar el cambio climático, entre otros retos. «Es la mejor manera que tenemos de contribuir a los Objetivos de Desarrollo Sostenible, mediante la innovación y la tecnología», explican desde Indra.