Los efectos de la inflación

Los productos básicos de la cesta de la compra se desbocan: el aceite se encarece un 28% y la pasta un 17%

El gasto en gran consumo se mantiene muy parecido en 2021 al registrado tras la explosión por el confinamiento en 2020, 95.000 millones, gracias en parte por la subida de los precios

Dos clientas en la sección de frutería de un supermercado
Dos clientas en la sección de frutería de un supermercadoLuis DíazLa Razón

De un tiempo a esta parte, los españoles tienen la sensación de que llenar la cesta de la compra les resulta sensiblemente más caro que hace unos meses. Y la realidad es que no se trata de una mera percepción, sino de una certeza que confirman los datos. El pasado ejercicio, los españoles gastaron en hacer la compra 95.000 millones de euros, una cantidad prácticamente similar a la de 2020, cuando el confinamiento provocó que las ventas del sector se disparasen por encima del 6%, según los datos del informe “Tendencias del Consumidor 2022″ elaborado por la consultora Nielsen. Pero, a diferencia de lo ocurrido en 2020, lo que permitió el ejercicio pasado mantener la facturación no fue el volumen de ventas, que retrocedieron un 2,8%, sino al avance de los precios que, de media, crecieron un 2,8%.

Según Nielsen, las presiones inflacionistas se han dejado sentir con especial intensidad en las últimas 12 semanas. Hasta noviembre, el mercado estuvo bastante contenido. Pero desde entonces, los precios de algunos productos básicos de la cesta de la compra se han disparado. El aceite de oliva, por ejemplo, creció un 28,1%, mientras que la pasta subió un 15,7% y las bebidas refrescantes lo hicieron un 11,2%. Sólo en diciembre, un mes que también es cierto está marcado por la campaña navideña, los huevos se encarecieron un 9,4%, las frutas un 10,9% y el pescado un 19,4%. De hecho, el informe revela que el 61% de los españoles ha percibido un incremento en el precio de la cesta de la compra en los últimos seis meses. Una subida de precios que desde Nielsen creen que se va a mantener en este arranque de año empujado por la inflación general.

Marca de distribución

En este contexto de precios altos, los consumidores han optado según Nielsen por diferentes estrategias para controlar el gasto como comprar marcas promocionadas, controlar el coste de la cesta de la compra o escoger el producto de menor precio de los favoritos. También se han decantado por priorizar las marcas de distribución -las conocidas como marcas blancas- sobre las de fabricante. En 2021, las ventas de los productos de marca de distribución avanzaron 0,8 puntos porcentuales, hasta alcanzar el 40% del mercado.

La evolución de la marca blanca se ha visto reflejado en el comportamiento de los operadores. Mercadona, que se caracteriza por tener un surtido corto que apuesta mayoritariamente por la marca propia, consolidó su liderazgo con una cuota de mercado del 26,7, tras ganar 0,8 puntos porcentuales. En segundo lugar se situó la francesa Carrefour, con una cuota del 7,6% y sin apenas avance en su cuota (0,1 puntos). Cerró el podio, sin embargo, otra cadena que tiene una propuesta comercial parecida a la de Mercadona, Lidl, con el 5,8% de la cuota de mercado y un avance notable de 0,7 puntos, el segundo mayor tras el de la compañía valenciana.

Analizando las ventas por territorios, los mayores avances el año pasado se registraron en Canarias, con una mejora del 2,3%, seguida de la Comunidad Valenciana y Baleares. Unos avances que, según Nielsen, reflejan la progresiva recuperación del turismo.

En cuanto al canal online, que tan importante se demostró durante el confinamiento y tantos avances registró, el año pasado siguió ganando terreno y avanzó, 0,5 puntos porcentuales. En cualquier caso, el 3% que acapara está muy lejos del 14% del Reino Unido o del 11% de Francia. Una distancia que se explica en gran medida, según Nielsen, por la tupida y potente red de establecimientos físicos que hay en España que permiten realizar compras de proximidad con un desplazamiento mínimo.