Paso atrás de la reforma laboral en mujeres y autónomos

Ya lo venían advirtiendo las asociaciones durante los últimos meses, que la ralentización en el empleo autónomo era evidente y que el parón en la afiliación al Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA) iba a sufrir un parón este año. Pues no se ha tenido que esperar al segundo semestre y en el final del primero se ha confirmado la pérdida de 10.422 afiliados, lo que situó el total de cotizantes por cuenta propia en 3.340.946. Eso significa una pérdida de 350 autónomos al día durante el mes de junio.

«Son unos datos pésimos que aventuran un otoño realmente complicado y apuntan, con toda la prudencia que cabe, a que 2022 va a ser el primer año, después de diez años, que se pierdan autónomos», advirtió ayer Lorenzo Amor, presidente de ATA.

En la misma línea, el presidente de UPTA, Eduardo Abad, puso el énfasis en el comercio minorista, que ha sufrido la desaparición de más de 40.000 establecimientos en dos años «sin que desde las administraciones se haga nada para frenar la incesante pérdida». Para Abad, estos datos «ponen en entredicho la fragilidad del comercio tradicional, del que se han olvidado por completo, centrando los proyectos de digitalización en pymes y empresas, dejando de lado el comercio de proximidad».

Las mujeres son otros de los colectivos damnificados por esta caída del empleo. El paro aumentó en 4.573 desempleadas (0,27%), hasta situarse en 1.728.388. Tras dos meses por encima de los 9,5 millones, la afiliación femenina volvió a perder ese nivel y registró en julio 9.480.585 cotizantes, el dato más bajo desde abril. Por contra, la afiliación masculina volvió a marcar un nuevo máximo, con 10.860.380 cotizantes. Tampoco fueron bien las cosas en el Sistema Especial Agrario, que perdió 51.496 empleos (-7,16%). El del Hogar registró 2.202 bajas, el 90%, mujeres.