Banco de España

Nuevo empujón récord a la deuda pública: supera por primera vez la frontera de 1,5 billones de euros

Alcanza el 116% del PIB, lejos del objetivo del Gobierno del 115,2% para todo el año

El agujero de la deuda pública continúa ensanchándose sin freno y ni siquiera puede verse límites ni hacia el fondo ni a lo ancho. Las administraciones públicas marcaron en septiembre el enésimo récord histórico y por primera vez se superó una frontera antes alcanzada, 1,504 billones de euros, lo que supone un aumento en términos relativos del 0,8% respecto al mes anterior, en una carrera cuyo vehículo continúa acelerando y nadie parece ser capaz de pisar el freno. La reducción de los ingresos en las arcas públicas y el aumento de los gastos han provocado que los números rojos se hayan incrementado un 5%, lo que serían 76.818 millones más en el último año, según los datos publicados por el Banco de España publicados hoy.

Pese a que la ratio de deuda pública sobre el PIB tomó una curva descendente durante los ocho primeros meses de este año, parece haberse estabilizado en el 116% -apenas se ha reducido una décima en el último mes-, por lo que a la ministra de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, solo le quedan tres meses para cumplir con su propio objetivo de déficit, que situó en el 115,2%, según estableció en el Plan de Estabilidad remitido a Bruselas a finales de abril, y que plantea el progresivo descenso a lo largo de los próximos cuatro ejercicios hasta situarse en el 109,7% en 2025. Por tanto, aunque la deuda es 5,9 puntos inferior a la registrada en el tercer trimestre de 2021, cuando ascendió a 121,9% del PIB, gracias al efecto que la inflación tiene sobre esta magnitud macroeconómica, no al ajuste del Gobierno en el gasto público, su importe es un 5% mayor.

La Administración Central ha vuelto a ser la gran catalizadora de la deuda. Su saldo negativo se elevó a 1,32 billones, el 88,3% del total, con un incremento interanual del 6,8%. Su saldo se incrementó en 15.224 millones, un 1,1% frente al cierre del agosto, y engorda en 84.331 millones en comparación con septiembre del pasado año, cuando se situaba en casi 1,24 billones (+6,7%).

Por su parte, el agujero de las Administraciones de la Seguridad Social se situó en 99.192 millones, una cantidad que prácticamente se ha estancado en el tercer trimestre -ocho millones más que en el mes anterior-, aunque el crecimiento interanual es del 8%, 7.337 millones más frente a los 91.855 millones que tenía en septiembre del pasado año, al sumar los préstamos concedidos por el Estado a la Tesorería General de la Seguridad Social para financiar su desequilibrio presupuestario.

Respecto a las administraciones territoriales, la deuda de las comunidades autónomas creció hasta los 315.015 millones, un 0,9% más interanual -se elevó en 2.721 millones-, aunque bajó en su recuento mensual -1.060 millones menos que en agosto-, mientras que ayuntamientos y cabildos se situaron la suya en 22.369 millones, apenas un 0,1% más anual y un ligero descenso intermensual del 1,3%. Por tanto, la consolidación en el conjunto de las Administraciones Públicas -la deuda en poder de diferentes administraciones- aumentó un 4,6 % respecto al año anterior, hasta 307.961 millones. Por instrumentos, los valores representativos de deuda superaron los 1,31 billones, y los préstamos experimentaron una ligera caída por debajo de los 187.000 millones.

Hoy mismo, el Tesoro Público español ha vendido 3.935,9 millones de euros de deuda a medio y largo plazo distribuida en tres emisiones que, en todos los casos, se han adjudicado a un interés marginal menor que en las últimas subastas equivalentes. Según los datos de la puja, la última del mes de noviembre, el Tesoro ha colocado entre los inversores 1.400 millones en bonos a tres años por los que abonará un interés marginal del 2,359%, por debajo del de la anterior subasta de este tipo (2,679%) y la primera vez desde enero que se reduce. También ha vendido 1.662,08 millones en obligaciones con una vida residual de nueve años y cinco meses con un interés del 2,909%, también menos elevado que en la puja previa, que fue del 3,313%. Por ultimo, los inversores han adquirido 873,82 millones en obligaciones que vencen en 2044, con una vida residual de 21 años y once meses, al 3,307%, por debajo del 3,601% de la última subasta de este tipo. Los inversores han solicitado 7.929,6 millones, el doble del montante finalmente adjudicado, que está en la franja media del objetivo que se había planteado el Tesoro (3.000 y 4.500 millones de euros).