Inmobiliario

Otra vuelta de tuerca para frenar los precios de la vivienda: prohibir la venta a extranjeros

Canadá veta las adquisiciones durante dos años a todos aquellos que no vayan a residir en el país

Dos personas se hacen un "selfie" con la ciudad de Ottawa al fondo
Dos personas se hacen un "selfie" con la ciudad de Ottawa al fondoSpencer ColbyAgencia AP

El problema con los precios de la vivienda no es exclusivo de España. En Canadá, el precio medio alcanzó en febrero su máximo histórico con 800.000 dólares canadienses (556.000 euros) y el Gobierno ha optado por una medida radical para tratar de embridarlo: prohibir las compras a todos los extranjeros que no vayan a residir en el país. El 1 de enero entró en vigor la ley que da cobertura a una medida que fue aprobada por el Gobierno de Justin Trudeau ante el aumento de los precios de la vivienda en el país norteamericano desde el comienzo de la pandemia.

Según ha explicado en los últimos meses Trudeau, en el mercado inmobiliario canadiense se han producido numerosas operaciones de especulación a manos de corporaciones e inversores extranjeros que han generado un problema de falta de vivienda y de precios disparados. “El atractivo de las casas canadienses está atrayendo a especuladores, corporaciones ricas e inversores extranjeros”, según recogía el año pasado la web de la campaña del partido del primer ministro canadiense. “Esto está generando un problema real de viviendas infrautilizadas y desocupadas, especulación desenfrenada y precios que se disparan. Las casas son para las personas, no para los inversores”, según explicaba Trudeau.

Lo paradójico de la entrada en vigor de esta ley es que se ha producido justo en el momento en que la burbuja de precios canadiense se está desinflando. La Asociación Canadiense de Bienes Raíces (CREA) asegura que, desde los máximos que alcanzaron en febrero, los precios ya han caído un 13%. La patronal del sector está además preocupada porque, como ocurre con muchos británicos y alemanes que se compran una residencia en España para retirarse tras su jubilación o como segunda residencia atraídos por su clima benigno, muchos canadienses hacen lo propio en países como Estados Unidos y México, en zonas cálidas como por ejemplo Florida. Y su miedo es que estos países tomen represalias en respuesta a la prohibición de Trudeau. CREA asegura que los canadienses son los mayores compradores extranjeros de propiedades estadounidenses, con más de la mitad de los inmuebles adquiridos en los estados de Florida y Arizona. “Si Canadá prohíbe que los estadounidenses posean propiedades en Canadá, deberíamos esperar que respondan de la misma manera”, según advierte la asociación.

Aunque no se ha planteado por ninguna formación política, implantar una medida de similares características tendría un impacto muy importante en el mercado inmobiliario español. Y no sólo por el efecto que tendría en las grandes operaciones corporativas. Según los últimos datos del Colegio de Registradores, en el tercer trimestre del año, las compras de vivienda en España por parte de ciudadanos extranjeros alcanzaron el 16% del total de las operaciones. Muchas de ellas no se podrían vetar pues sus ciudadanos pertenecen a países integrados en la Unión Europea. Sin embargo, los principales compradores extranjeros, los británicos, ya están fuera del espacio europeo.