Euros

Así se fabrica un billete de 10 euros

Uno de los billetes más comunes en Europa es el de 10 euros.

En un mundo donde las transacciones digitales están en auge, el dinero en efectivo sigue siendo una pieza fundamental de nuestra economía. Uno de los billetes más comunes en Europa es el de 10 euros. Pero, ¿alguna vez te has preguntado cómo se fabrica este billete tan familiar? El proceso es complejo y altamente controlado, con múltiples etapas que aseguran la seguridad y la calidad del producto final. Aquí te mostramos cómo se hace un billete de 10 euros desde cero.

La producción de billetes de euros está dirigida por el Banco Central Europeo, pero es un proceso en el que participan los bancos centrales nacionales de los países de la zona Euro, como es el caso del Banco de España.

El Banco Central Europeo asigna una cuota de fabricación al Banco de España, que éste a su vez encarga a Imbisa, una sociedad en la que tiene una participación del 80%.

El 20% restante corresponde a la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre, la Real Casa de la Moneda.

El proceso de fabricación se compone de cinco fases principales: litografía, serigrafía, calcografía, numerado y barnizado, y corte, selección y empaquetado.

La litografía es la técnica que permite imprimir simultáneamente el anverso y el reverso de los pliegos de papel.

En este proceso se utilizan múltiples tintas y planchas y se asigna un número a cada pliego impreso para poder hacer un seguimiento en las siguientes fases.

En la serigrafía se estampa el número del valor del billete con una tinta especial que contiene diminutos fragmentos de material que cambia de color, del verde esmeralda al azul oscuro al girar la imagen o cambiar el ángulo de visión.

En la calcografía se imprime por medio de presión y temperatura determinadas áreas e imágenes a las que se le da un relieve especial detectable al tacto.

A continuación se enumera individualmente cada billete.

A los billetes de 5, 10 y 20 euros se les aplica una capa de barniz para alargar su vida útil.

Una vez terminada la producción de los pliegos, estos se cortan hasta obtener los billetes individuales.

En esta fase se identifican y destruyen los billetes que puedan tener defectos de fabricación.

Los billetes válidos se agrupan en centenas y en millares se plastifican y se empaquetan en cajas.

Por último, se cargan en vehículos que los transportan al Banco de España para su puesta en circulación por toda la zona Euro a través de las entidades financieras.

EFE