Declaración de la Renta
No cometas este error al realizar la declaración de la Renta: te puede salir muy caro
Realizar la declaración de la Renta sin revisar cada detalle puede derivar en fallos que supongan sanciones y recargos
La campaña de la Renta 2024-2025 comienza hoy, 2 de abril de 2025, y con ella, miles de contribuyentes tendrán que enfrentarse a la tarea de presentar su declaración. Aunque puede parecer un proceso rutinario, un error común puede salir muy caro, ya que puede derivar en sanciones económicas, recargos o incluso en una inspección de Hacienda.
Cada año, la Agencia Tributaria advierte sobre los fallos más frecuentes que cometen los ciudadanos al presentar su declaración. Muchos de estos errores se pueden evitar con una revisión adecuada y una planificación previa. Sin embargo, no prestar atención a ciertos detalles puede suponer una diferencia significativa en el resultado final de la declaración.
¿Cuáles son las fechas a tener en cuenta para la campaña de la Renta 2025?
La declaración de la Renta se podrá presentar de diferentes maneras y en distintos plazos:
- Por Internet: desde el 2 de abril hasta el 30 de junio de 2025.
- Por teléfono: a partir del 6 de mayo, con solicitud de cita previa disponible desde el 29 de abril.
- De manera presencial: desde el 2 de junio, con cita previa desde el 29 de mayo.
Tener presente estos plazos es fundamental para evitar sanciones por presentación tardía.
Eston son los errores que debes tener en cuenta para no perder dinero
1. No revisar los datos fiscales
Uno de los fallos más habituales es asumir que los datos proporcionados por Hacienda son siempre correctos. La Agencia Tributaria obtiene esta información de empresas, bancos y otros organismos, pero es posible que contenga errores o datos desactualizados.
Si el contribuyente presenta su declaración sin revisar estos datos y hay algún error, puede recibir un requerimiento de Hacienda, lo que conllevaría sanciones o la obligación de pagar intereses de demora. Por ello, es recomendable comprobar con detalle la información antes de confirmar el borrador.
2. Olvidar declarar ingresos adicionales
No incluir todos los ingresos obtenidos durante el año es otro error frecuente que puede acarrear consecuencias graves. Además del sueldo habitual, es importante declarar otros tipos de ingresos, como:
- Trabajos esporádicos o freelance.
- Ingresos por alquiler de vivienda.
- Rendimientos de cuentas bancarias o inversiones.
- Subvenciones y ayudas recibidas.
Si Hacienda detecta que no se han declarado ciertos ingresos, puede aplicar multas que oscilan entre el 50% y el 100% de la cantidad omitida, dependiendo de si el error fue involuntario o si se considera un intento de evasión fiscal.
3. No aprovechar las deducciones fiscales
Muchos contribuyentes pagan más impuestos de los necesarios porque no aplican todas las deducciones a las que tienen derecho. Existen deducciones por diferentes motivos, como:
- Familiares: por hijos a cargo, discapacidad o familias numerosas.
- Vivienda: por alquiler o compra de vivienda antes de 2013.
- Autonómicas: cada comunidad autónoma ofrece deducciones específicas, como por gastos en educación o transporte.
Consultar todas las deducciones disponibles y aplicarlas correctamente puede reducir la cantidad a pagar o incluso aumentar la devolución.
4. No saber si estás obligado a presentar la declaración
No todas las personas tienen que hacer la declaración de la Renta, pero algunos contribuyentes creen erróneamente que no están obligados cuando en realidad sí deben presentarla.
En general, deben hacer la declaración quienes hayan recibido más de 22.000 euros anuales de un solo pagador. Sin embargo, si los ingresos provienen de dos o más pagadores, el límite baja a 15.876 euros. También están obligados los autónomos y aquellos que han recibido prestaciones por desempleo.
No cumplir con esta obligación puede derivar en sanciones y problemas con Hacienda, incluso en una inspección fiscal.
5. Presentarla fuera de plazo
Uno de los errores más perjudiciales es dejar la declaración para el último momento y no llegar a presentarla a tiempo. La Agencia Tributaria establece plazos estrictos, y no cumplirlos puede generar recargos y sanciones:
- Si la declaración sale a pagar, el recargo será del 1% por cada mes de retraso durante el primer año. Si el retraso supera los 12 meses, el recargo será del 15% más intereses de demora.
- Si la declaración sale a devolver, la sanción será de 100 euros si se presenta fuera de plazo sin que Hacienda lo haya requerido.
Por ello, es recomendable no esperar hasta el último día y, si es posible, presentarla con antelación.
Realizar la declaración de la Renta sin revisar cada detalle puede salir muy caro. Errores como no comprobar los datos fiscales, omitir ingresos, no aplicar deducciones o presentar la declaración fuera de plazo pueden derivar en sanciones y recargos.
Para evitar problemas con Hacienda, lo mejor es ser precavido, revisar la información con antelación y cumplir con los plazos establecidos. En caso de dudas, recurrir a un asesor fiscal o utilizar herramientas de ayuda puede marcar la diferencia y evitar costes innecesarios