Agricultura

El continuismo entre los ministros con poder sobre el campo mantiene la incertidumbre del sector

Cuatro de los cinco titulares de estos ministerios repiten en sus cargos, con muchos retos pendientes de resolución. Planas continúa en Agricultura y no logra su salto a Exteriores, como quería

El ministro de Agricultura, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Luis Planas
El ministro de Agricultura, Pesca, Alimentación y Medio Ambiente, Luis PlanasKiko HuescaAgencia EFE

El nuevo Gobierno de Pedro Sánchez puede calificarse de continuista desde el punto de vista de la política agraria, entendida en sentido amplio. De los cinco ministros que tienen competencias directas o indirectas sobre el campo y el medio rural, cuatro siguen en sus puestos y sólo uno ha cambiado, el de Consumo. Así, Luis Planas continúa al frente del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. Sánchez ha optado por mantenerlo y Planas ha recibido un premio y un castigo. Ha resultado premiado, porque, de momento, sigue en el Gobierno, que era su objetivo principal; pero, al mismo tiempo recibe un varapalo porque no sale de Agricultura, cuando su segundo objetivo era precisamente este y, a ser posible, pasar al Ministerio de Asuntos Exteriores, en el que, salvo contadas excepciones, no tiene administrados directos. Planas será el ministro que tenga una relación más directa con el campo, el mundo agrario y el medio rural. Pero no es el único.

Así, por ejemplo, también sigue en su puesto la ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, que mantiene la vicepresidencia tercera, por el momento. Es «la jefa», según Planas, y de ella dependen asuntos tan importantes como el agua que hay (o no hay) para regar o la normativa sobre protección del lobo. Ambos temas estuvieron de plena actualidad durante la pasada legislatura y continuarán en el primer plano durante la presente. Pero es que también dependen de ella todas las cuestiones medioambientales, que cada día que pasa tienen más importancia e incidencia para el sector agrario, y la despoblación. Por ejemplo, está pendiente de aparecer el estudio de impacto medioambiental del Plan Estratégico Nacional de la Política Agraria Común (PAC) que se aplica actualmente, un punto de gran importancia para los agricultores y ganaderos europeos.

Otra cartera en la que no se han registrado cambios es de la María Jesús Montero, la ministra de Hacienda, que también se mantiene en su puesto, y con ascenso a vicepresidenta, aunque sea la última; de ella dependen los impuestos y si habrá modificación, o no, en el régimen de autónomos, punto de vital importancia para el campo. También continúa al frente de Trabajo Yolanda Díaz, con asuntos tan polémicos como la subida del salario mínimo interprofesional (SMI), con gran repercusión para el campo, y las modificaciones en las normas por las que se rigen los contratos.

Finalmente, el único departamento en el que se han registrado cambios es el que asume las competencias de Consumo. El polémico Alberto Garzón, muy criticado por los ganaderos a raíz de sus manifestaciones, ha salido del Gobierno y ahora se hará cargo Pablo Bustinduy, que entra por el cupo de la coalición Sumar. Bustinduy fue de los miembros fundadores de Podemos, pero luego tuvo enfrentamientos con Pablo Iglesias y su grupo.