Energía

Corredor descarta dimitir por el informe del Gobierno sobre el apagón y culpa de todo a las eléctricas por "fallos y desconexiones no justificadas"

La presidenta de Red Eléctrica no se considera señalada por la ministra Aagesen y asegura que el gestor no tiene responsabilidad jurídica porque aplicó los protocolos

La presidenta de Red Eléctrica (REE), Beatriz Corredor, descarta dimitir pese al informe del Gobierno en el que, con datos de todas las partes, se apunta a una deficiente programación del gestor REE el día previo al apagón, así como en su respuesta para afrontar los sucesos que derivaron en el apagón del pasado 28 de abril.

El gestor ha presentado hoy su propio informe técnico apenas 24 horas después del varapalo recibido por el documento del Ejecutivo, en el que pese a que se reparten culpas entre el gestor y las compañías generadoras, Red Eléctrica sale malparada por las decisiones arriesgadas que concluyeron subidas de tensión y en el cero eléctrico.

Sin embargo, Corredor ha defendido el correcto trabajo de Red Eléctrica y ha cargado contra las compañías privadas, que además, no han facilitado, según su versión, toda la información precisa requerida. "Tengo plena confianza en los cálculos que hizo el operador. La realidad es que hubo un grupo que se declaró indisponible el día previo al apagón y se decidió no sustituirlo, según esos cálculos", señala.

Corredor ha recordado que "el operador no gestiona las redes de distribución, tampoco las redes privadas de generación y alimentación ni los centros de control que están vinculados a los operadores. Eso no significa que no exista coordinación". Todo está coordinado al "mínimo detalle", ha defendido la exministra socialista.

El informe incluye los datos en la "caja negra" de REE, que quedan grabados en fracciones de 20 milisegundos, hasta donde alcanzan las posibilidades de monitorización.

En este punto Corredor ha cargado contra las eléctricas porque, según ha dicho, la información facilitada en la que estos han especificado su carácter de confidencialidad, no siempre ha tenido "la calidad deseable".

Corredor ha asegurado que el informe, en el que "no se señalan culpables" aunque apunta en todo momento a las eléctricas y autoexculpa a Red Eléctrica, se ha transmitido al Gobierno y a la CNMC. "Hemos pedido que todos los datos sean públicos", ha remarcado.

Sobre las consecuencias jurídicas, "estas se dirimirán en la CNMC y en los juzgados". En este sentido, el consejero delegado de REE, Roberto García Merino, ha rechazado que el gestor de las redes tenga que hacer frente a cualquier demanda porque "se aplicaron los protocolos".

Fallo en una planta

Concha Sánchez, directora general de operación de Red Eléctrica, ha sido la encargada de detallar el informe del gestor. Sánchez descrito la situación justo antes del apagón. "A las 12:00 del 28, la situación era normal para un día de primavera. No había indicios de lo que iba a suceder". El informe del Gobierno detecta problemas desde primera hora de la mañana.

Luego se concatenaron cinco eventos. El primero, hubo una oscilación "forzada" que afectó a nudos con una fluctuación muy importante que se mantuvo más de 4 minutos. "El sistema no puede estar oscilando por lo que se aplicaron los procedimientos. Conectando líneas que no teníamos conectadas y reducir la exportación a Francia". Esta respuesta generó, según el informe del Gobierno, problemas de tensión.

En cualquier caso, según REE, la oscilación se corrige. Pero a las 12:16 se vuelve a reproducir la oscilación. "Hubo un ligero incremento de la tensión en el sistema, siempre dentro de los rangos de operación".

El origen de la oscilación forzada está perfectamente identificada, en una planta fotovoltaica en Badajoz, conectada a la red de transporte, pero por confidencialidad no ha podido facilitarse qué planta es. "Podría deberse a un funcionamiento incorrecto de la planta". La respuesta, según el operador, fue la programada y la adecuada.

"La programación de grupos para el control de tensión (seis grupos de ciclos combinados de gas y tres reactores nucleares) proporcionaba suficientes recursos al sistema, en cambio lo que nos encontramos es que esos recursos no se prestaron de forma efectiva. Hubo un incumplimiento".

"¿Qué hubiera pasado si los generadores acoplados en el momento de incidente hubieran cumplido? No habría habido oscilaciones ni se hubiera perdido el sincronismo ni hubiera habido apagón".

"Que hubiera habido un grupo más acoplado no hubiera cambiado nada", ha explicado Sánchez, en referencia a la central de ciclo combinado que debía respaldar el sistema y el día previo informó de que estaba indisponible y no fue sustituida. Pero sí "se amplió la programación de grupos acoplados", ha defendido. "Otra cosa es cómo fue la prestación del servicio de control dinámico".

A las 12:19, hay otro evento de oscilación diferente, de tipo natural. "Es conocida en el sistema eléctrico europeo, consecuencia de que España está en el extremo del sistema síncrono europeo. Teníamos la tensión en valores nominales, pero la oscilación nueva lleva al sistema a subtensiones. Volvemos a conectar líneas y reducimos más exportación a Francia".

"Cuando estábamos recuperándonos, empieza a subir la tensión en el sistema". En este punto REE no logra identificar qué ocurrió e indica un "crecimiento anómalo de la demanda efectiva desde la red de transporte, un crecimiento instantáneo. La demanda no se comporta así". REE atribuye ese crecimiento de la demanda a pérdidas de generación en pequeñas instalaciones que generaron una pérdida de 700 MW de generación.

En este punto, el sistema está en una situación de bajas tensiones. "Ese primer disparo (desconexión de generación en Granada) fue un transformador y la generación también se desconecta". Esa desconexión no está justificada y se pierden 355 MW de generación y absorción de energía reactiva necesaria para equilibrar el sistema. Sube la tensión.

"Podemos pensar que la gestión de esas redes que no gestionamos no se había hecho una adaptación suficientemente rápidas". Posteriormente, hay otras desconexión en una subestación de la red de transporte de Badajoz por la que se pierden 582 MW y luego otra 145 MW también en Badajoz. Se producen más desconexiones en cadena por una adaptación no suficientemente rápida de las redes que no gestiona REE.

Caída total

En el evento 5 hay una desconexión en varios puntos, de 834 MW. "Estimamos que se pierden 1.150 MW de renovable. A partir de este momento, con una desconexión superior a 2.000 MW, ya no fue posible mantener la tensión. Ya podemos hablar de sobretensión en la red de transporte. Con el volumen de generación desconectado el parámetro de generación consumo que nos da la frecuencia, no ofrece caídas de frecuencia muy importantes". "Ahora las caídas sí están justificadas".