Economía

Los riesgos de no fichar correctamente la jornada laboral

6 de cada 10 empleados asegura realizar horas extra, aunque solo un 5 % las declara oficialmente

6 de cada 10 empleados asegura realizar horas extra, aunque solo un 5 % las declara oficialmente.
6 de cada 10 empleados asegura realizar horas extra, aunque solo un 5 % las declara oficialmente.Cedida

Mientras la reducción de la jornada laboral sigue paralizada tras su rechazo en el Congreso, lo que sí permanece en vigor es la obligación legal de registrar la jornada laboral. Además, el Ministerio de Trabajo ultima una normativa que exigirá que este registro sea digital y accesible en todo momento para la Inspección de Trabajo. No fichar de manera correcta, lejos de ser un trámite menor, puede acarrear consecuencias relevantes tanto para los trabajadores como para las organizaciones.

Horas trabajadas que no cuentan

No registrar con precisión la entrada, la salida o las pausas puede provocar que las horas extra no se reconozcan ni se compensen, generando pérdida de derechos y de motivación. Según datos de Protime, 6 de cada 10 empleados realizan horas adicionales, pero apenas un 5 % las declara, lo que pone de manifiesto la brecha entre el tiempo realmente trabajado y el oficialmente registrado.

Aunque un 67 % de los asalariados indica que su empresa ya cuenta con sistemas de control y un 78 % recibe algún tipo de compensación, el fichaje sigue siendo la llave para garantizar que ese esfuerzo quede documentado.

Un reto mayor en el trabajo híbrido

Con el auge del trabajo flexible —6 de cada 10 profesionales lo prefieren, combinando presencialidad y teletrabajo—, la precisión en el registro cobra aún más relevancia. El fichaje permite demostrar disponibilidad y evitar malentendidos en entornos donde la jornada no siempre se desarrolla en la oficina.

Más allá de la pérdida de horas extra, una mala gestión del registro horario puede afectar a la cultura corporativa, generar desconfianza o incluso acarrear sanciones legales. Para las compañías, no disponer de sistemas fiables o registros correctos puede traducirse en multas y responsabilidades legales adicionales.

"El reto no es solo cumplir con la normativa, sino utilizar las herramientas digitales para crear entornos laborales más justos y transparentes. Un registro bien gestionado protege tanto a la empresa como al empleado", señala Óscar Bermejo, CTO Spain de Protime.

La tecnología está redefiniendo el control del tiempo. El 86,6 % de los trabajadores cree que la digitalización, la automatización y la inteligencia artificial mejorarán la precisión y transparencia de este proceso. De este modo, el fichaje deja de ser una simple obligación legal para convertirse en un instrumento estratégico en la gestión de derechos laborales y en la construcción de relaciones de confianza.

No registrar la jornada de forma correcta supone perder compensaciones, derechos y seguridad jurídica en un mercado laboral cada vez más digital y flexible. Las empresas que apuesten por sistemas digitales y fiables no solo evitarán sanciones, sino que también reforzarán la confianza y la equidad en sus equipos.