CIBERSEGURIDAD
Qué son los ataques DDoS y cómo evitarlos
Los ataques DDoS se multiplicaron durante el último año, representando un riesgo para las empresas. Estas son algunas estrategias efectivas para evitarlos.
A lo largo del 2023, se registró un aumento significativo en las violaciones de seguridad. Especialmente, en los ataques de Denegación de Servicio Distribuido (DDoS), los cuales afectaron a numerosas empresas en la industria. Esto se volvieron más frecuentes debido al creciente éxito de tecnologías como Inteligencia Artificial, Internet de las Cosas y servicios de almacenamiento en la nube.
Un ataque DDoS es un tipo de ataque en el cual se utiliza malware para inundar una red con un volumen masivo de tráfico malicioso. El objetivo de estas acciones es sobrecargar los sistemas, dejándolos inoperativos durante largos periodos de tiempo. Lo que resultaría en pérdidas masivas para las empresas afectadas. No obstante, existen varias formas de prevenirlos o de reducir el impacto.
¿Cómo es posible evitar los ataques DDoS?
Es imposible evitar completamente que un pirata informático intente llevar a cabo ataques DDoS. Sin embargo, es fundamental para las organizaciones desarrollar un plan en respuesta a posibles incidentes. En pro de garantizar que la fuerza laboral actúe de forma rápida y efectiva. Además de establecer relaciones con proveedores o profesionales de seguridad confiables.
Aumentar el nivel de seguridad de la red
Los ataques de DDoS solo tienen impacto cuando los piratas informáticos disponen de tiempo para aumentar las solicitudes del servidor. Por lo cual, identificarlos de forma temprana es vital para tomar medidas de seguridad. Esto gracias a configuraciones adecuadas de Firewalls y Routers, lo que ayudaría a filtrar y bloquear cualquier tráfico sospechoso antes de que afecte la red.
El uso de antivirus y antimalware permitiría detectar cualquier tipo de actividad sospechosa antes del ataque. Además de que implementa herramientas especializadas en ciberseguridad, las cuales bloquean tráfico anormal, analizan firmas de ataques conocidas y evitan la suplantación de identidad. Asimismo, comprueban si el tráfico inusual proviene de una dirección de origen.
Reduzca la superficie expuesta a ataques DDoS
Esto va de la mano con el punto anterior. Ya que la segmentación de la red ayudaría a controlar diferentes sistemas, cada un con protocolos únicos de seguridad. En este sentido, se disminuye la superficie expuesta a los ataques, evitando que los piratas informáticos se desplacen lateralmente a través de la red al buscar información confidencial y llevar a cabos sus actividades.
Al mismo tiempo, nos aseguramos de que los endpoint (ordenadores, portátiles, móviles, etc) no queden expuestos. Y así minimizar los posibles puntos de ataque y concentrar los esfuerzos de seguridad en zonas más importantes. Esto a través de servicios de CDN (Distribución de Contenido), dispersando la carga del tráfico a través de múltiples servidores y ubicaciones geográficas.
Señales de advertencia, distinguir el tráfico anormal
Analizar el tráfico constantemente es un método ideal para detectar rastros de ataques DDoS. Ya que si el equipo logra identificar rápidamente las señales de un posible bloqueo de servicios, podrá tomar medidas que consideren oportunas. De esta manera, aceptarán solo el tráfico que el host es capaz de soportar sin colapsar completamente, limitando el acceso y velocidad de los atacantes.
En adición a esto, algunas señales de tráfico inusual podrían manifestarse como problemas de servidores o mala conexión. Así como una alta demanda en una sola sección de la web. Al mismo tiempo, podrían provenir todas de una misma dirección o grupo de IP. Al tener esto en cuenta, minimizarán la posibilidad de que una pequeña saturación pase desapercibida, siendo vital al momento de prevenir ataques de DDoS.
Implementar tecnología en la nube para contrarrestar ataques DDoS
La protección basada en nube ofrece la capacidad de escalar y manejar incluso ataques de DDoS volumétricos. Es por ello que cada vez más empresas apuestan por sistemas de nube híbrida, los cuales combinas nubes públicas y privadas. Esta combinación permite redirigir el tráfico entre ambas, lo que facilita una mejor respuesta frente a los ataques de DDoS.
Contratar un proveedor de ciberseguridad
Contratar un proveedor de ciberseguridad es un paso clave para complementar la protección basada en la nube. Estos proveedores suelen ofrecer combinaciones de sistemas antimalware y detección de tráfico inusual de DDoS, en combinación con tecnología en la nube para redirigir ataques. Esta opción es la opción más viable y efectiva a la hora de prepararse para posibles denegaciones de servicios.
Es así como invertir en proveedores de ciberseguridad ayudaría a cerrar los agujeros de la red. De manera que las empresas fortalezcan su defensa contra los ataques de DDoS. A su vez, brindándoles la capacidad de mitigarlos, mantener la continuad del servicio u operaciones laborales. Así como proteger la integridad de sus sistemas y datos confidenciales.