Se cumplen 11 años del asesinato de dos guardias civiles en Afganistán

El día 25 agosto de 2010, el capitán José María Galera Córdoba y el alférez Abraham Bravo Picallo, pertenecientes al Centro de Adiestramientos Especiales (C.A.E. ) de la Guardia Civil, realizaban una clase de formación a policías afganos en la antigua Base del Ejercito Español situada en Qala-e-Now. provincia de Badghis, Afganistán.

Un talibán infiltrado, “aprovechando la situación, disparó cobardemente alcanzando también al interprete Ataollah Taefi Kalili. asesinando a los tres”, se señala en redes de la Benemérita.

“Ellos cumplieron con su obligación, prestando un servicio en favor de todos los ciudadanos en tierras lejanas y no dudaron en arriesgar sus vidas para formar aquellos policías y así intentar protegerlos, dándonos ejemplo de entrega y sacrificio y convirtiéndose en nuestros héroes Caídos y Heridos. Nosotros en este día cumplimos también con nuestra obligación de engrandecer su memoria y recordarles como se merecen los héroes de España. D.E.P.”.

El el comandante Javier García Jimeno falleció en el accidente de Yakolev 42, cuando regresaba a España. Fue el 26 de mayo de 2003 cuando intentaba aterrizar en el aeropuerto turco de Trabzon, para hacer una escala técnica. Murieron otros 61 militares españoles.

La desordenada retirada de las tropas, después de 20 años de trabajo en la zona, ha causado sentimiendos de “desolación y frustración” entre los que allí prestaron servicio, tal y como publicó este periódico. España ha tenido 104 bajas mortales. La sensación, tras un trabajo tan intenso, y la vuelta de los talibanes al poder, es la citada, aunque siempre con el cumplimiento del deber por delante.

“Decepción, tristeza, frustración”. Es lo que siente el teniente coronel de la Guardia Civil Ramón Clemente después de ese paso atrás que ha dado Afganistán, “después de que todo lo que se había avanzado se haya desmoronado tan rápidamente. Tenían preparación y medios suficientes para aguantar el envite”, asegura.

“Te duele, te frustra, te decepciona que no hayan sido capaces de aguantar el envite”, dijo a Efe este mando del Instituto Armado que en 2013, y durante seis meses, formó parte del contingente español que asesoraba policial y militarmente a las fuerzas de seguridad y al Ejército afganos. Clemente no deja de preguntarse cómo en tan poco tiempo la insurgencia, los talibán, han conseguido hacerse con todo. Porque el otro Afganistán, el que dejaron en 2013, tenía “instrucción, armamento y adiestramiento para poder haber aguantado sin problema”.

¿Qué ha pasado? Es difícil dar una única respuesta pero el teniente coronel resume así una de ellas: “Hay un arma poderosísima, que es la moral y la voluntad de vencer”; “si no hay alguien que te anime, te lidere o te convenza de que puedes hacerlo, puedes hundirte”.

A este guardia le preocupa el gran paso atrás que supone el avance talibán. Porque no le cabe la menor duda de que se va a volver a la aplicación “estricta” de la sharía, la ley islámica.