Sumar

Yolanda Díaz sigue sin definir su futuro político y tomará la decisión en febrero

Olvida citar a Sánchez al explicar cuáles son los proyectos de país que la preceden, aunque el presidente lideró sus líneas maestras con “España 2050″. Los tiempos de la vicepresidenta desesperan a Podemos, que se prepara con una “gira” para exhibir sus logros

Sumar vuelve a coger impulso tras un momento de indefinición en el que en el espacio de izquierdas comenzaban a lanzar análisis pesimistas sobre el proyecto de la vicepresidenta, por no dar respuesta rápida a qué y cómo pensaba articularse. Empieza a engrasarse, al definir con palabras cuál es el objetivo de la plataforma diseñada a pensar un «proyecto de país» para la próxima década. Un impulso que se sucede, de manera paralela, con Podemos –fuerza que espera ser principal aliada de Yolanda Díazbuscando exhibir músculo y recuperar su fortaleza política con una «gira» por los territorios para explicar también su proyecto. En clave interna, contrapone dos modelos de concebir la política, que en un futuro muy cercano deberían tener un mismo camino político, la confluencia a la izquierda del PSOE. En este punto, sigue todo por hacer y por acordar.

Se atisba lejano porque la ministra y su «guardia de corps» quieren aislarse completamente de las lógicas de los partidos para ofrecer un «contrato social» a la ciudadanía, remarcan. Y es por ello, que en los actos de escucha, o en la conversación informal con sus equipos recién nombrados, no quieren oír hablar de futuros pactos políticos o de listas y, menos , de prisas.

Y es que Sumar, asegura la vicepresidenta, no entiende –por ahora– de fechas electorales. «Aquí no cabe restringir la imaginación al tamaño de una urna ni al tamaño de una lista electoral. Esto no va de urnas ni listas, sino de mirar hacia delante», avisó ayer en la presentación de los grupos de coordinación destinados a diseñar el programa de país. Un dardo a las voces que llegan desde Podemos para apremiar a Díaz para que ponga punto final a su «escucha» y autodefina pronto su proyecto político y su implicación en el mismo. Ante estas presiones, la líder de Unidas Podemos avisó que Sumar no va de «trompicones», ni de «correr», sino «de pensarnos, de tejer un movimiento ciudadano y de pensar cada una de las tareas que hoy tenemos pendientes». Recalcó que «Sumar no se acomoda a los tiempos electorales». Mensajes que atrajeron la atención de expolíticos o desencantados de Podemos, que se encontraban en la presentación, como el diputado Txema Guijarro, el ex secretario general en País Vasco, Lander Martínez, el exalcalde de IU en Rivas, Pedro del Cura, o el ex asesor en el ministerio de Ione Belarra, Jorge Uxó, entre otros.

En el pensamiento de Díaz y los «ideólogos» de Sumar está repensar un país para los próximos diez años, mirando con lupa todas las áreas; feminismo, derechos sociales, educación, cultura, sanidad, calidad democrática, economía, ciencia, urbanismo, innovación, transición ecológica... Algo que, según su equipo, no entiende de tiempos y que trascenderá las citas electorales, ineludibles –por otra parte–. Así presentó a un equipo de 35 coordinadores que serán los encargados de elaborar las conclusiones de su proceso de escucha.

El programa se espera para el mes de febrero, por lo que la vicepresidenta atrasará a esta fecha también su decisión de seguir siendo la cabeza visible de Sumar y de presentarse como candidata a presidenta a las próximas generales. Un escenario que todavía no ha decidido. En caso de no hacerlo, Sumar ya habría presentado un «contrato social», objetivo prioritario, dicen algunas voces comprometidas con el proyecto. Si bien la vicepresidenta es cuidadosa sobre su futuro, en su equipo existe una ilusión clara de que Sumar llegará a las generales y de que ella lo liderará. El dogma fue definido claramente ayer por una de las ideólogas, la doctora en Ciencia Política, Marta Lois. «Tenemos que concretar políticas e ir más allá de las palabras. Vamos a construir un diálogo, una inteligencia colectiva para que podamos llegar a acuerdos y consensos».

A todas luces, lo claro es que Díaz quiere ser la urdidora del que ve como el quinto gran proyecto de país en España. Citó a sus predecesores, Adolfo Suárez, Felipe González, José Luis Aznar y José Luis Rodríguez Zapatero. Se olvidó de quien tiene en sus manos el proyecto de país actual, Pedro Sánchez. Intencionadamente o no. Si bien, dicen en Sumar, el líder del Ejecutivo no ha podido emprender un proyecto de país al tener que enfrentarse a la pandemia o la guerra. Sin embargo, Sánchez sí plantea este camino con el estudio en el que trabajan un centenar de investigadores «España 2050».