España

El PSOE suspende el acto con barones para celebrar la victoria de 2019

La dirección alega “problemas de agenda” para rectificar la convocatoria de un acto que no se había comunicado oficialmente

El presidente del Gobierno Pedro Sánchez dirigiéndose al público en el acto organizado por el PSOE para conmemorar el 40 aniversario de la primera victoria electoral socialista en 1982
El presidente del Gobierno Pedro Sánchez dirigiéndose al público en el acto organizado por el PSOE para conmemorar el 40 aniversario de la primera victoria electoral socialista en 1982Festival de MéridaEuropa Press

El acto estaba previsto, pero no se había anunciado ni agendado oficialmente y es, a esto último, a lo que se aferra ahora el PSOE para negar que haya ninguna rectificación en sus planes. Ferraz había ideado para este sábado 12 de noviembre en Ifema (Madrid) un evento de conmemoración del tercer aniversario de la victoria del PSOE en 2019. El primer triunfo en las urnas de Pedro Sánchez fue un hito importante para los socialistas, que les permitió investir de la legitimidad de las urnas el poder que consiguieron un año antes tras la exitosa moción de censura a Mariano Rajoy.

En el acto estaba previsto que el secretario general estuviera arropado por todos los barones del partido, una foto de unidad territorial que el PSOE busca reproducir con cierta asiduidad para exhibir músculo y cierre de filas de cara a las elecciones de 2023. Sin embargo, alegando «problemas de agenda» –Sánchez viajará el domingo 13 hacia Bali (Indonesia) donde se celebra la cumbre del G20– desde la dirección socialista se descarta ahora su celebración, en un intento de dotar de normalidad al inconveniente surgido. «Hay múltiples actos de aquí a diciembre y en ocasiones se cambian cuando se considera que es prioritario uno sobre otro», señaló ayer Pilar Alegría en rueda de prensa.

Sin embargo, este no era un acto cualquiera. Se encuadra dentro de la campaña que Sánchez tiene previsto emprender en los próximos meses para rodearse del poder municipal y autonómico, proyectando una imagen de unidad interna de cara a los comicios. Pero, lo cierto es que según apuntan fuentes socialistas a este diario la idoneidad de celebrar este aniversario –que extraoficialmente sí se comunicó a los periodistas en el marco de la apretada agenda de actos que Sánchez desplegará hasta final de año– tan cercano al de los 40 años de la victoria de Felipe González era cuestionable.

En primer término, porque las comparaciones serían evidentes. Fuentes socialistas reconocen que iba a ser difícil igualar «la imagen tan potente» que se consiguió en Sevilla, donde se congregó a unas 3.700 personas, según la organización. Y, en segundo término, porque entonces fue imposible reunir a los barones territoriales, que expusieron diversos motivos de agenda para ausentarse del acto junto a Felipe González. Ahora, su presencia o reiterada ausencia se leería como un mensaje en clave interna hacia Sánchez y lo que representa.

Las distancias que están marcando los presidentes autonómicos respecto a Ferraz son evidentes y en el PSOE miden bien cada movimiento para que no resulte contraproducente. «Son líderes autonómicos, no tienen que estar en todos los actos aplaudiendo», defienden desde la dirección, dejándoles cierta autonomía, y limitando su aparición a la gira de «pisar calle» que el presidente ha emprendido por los distintos territorios. La autonomía es tal que algunos «hacen la guerra por su cuenta», según definen también fuentes socialistas, para intentar que el desgaste del Gobierno no les contamine. Esta independencia se percibió en el debate fiscal, donde cada territorio –rompiendo la línea oficial de Moncloa– presentó sus propias propuestas en clave autonómica. En paralelo, Sánchez sigue enfocado en su proyección internacional con la visita a Corea del Sur (17 y 18 de noviembre) y la presidencia de la Internacional Socialista.