Requisitos

Una coalición y listas pactadas, líneas rojas de Podemos para llegar a un acuerdo con Yolanda Díaz

Los morados presionan a la vicepresidenta para que acelere. Reclaman un pacto justo para las listas electorales y rechazan integrarse en Sumar

Las ministras de Trabajo Yolanda Díaz, en Moncloa
Las ministras de Trabajo Yolanda Díaz, en MoncloaAlberto R. RoldánLa Razón

La izquierda sigue enfrentándose a la indefinición de su futuro más próximo. El calendario corre en la contra de este espacio que debe encontrar la fórmula mágica con la que entenderse de cara a las elecciones generales de finales de año. La teoría es que toda la izquierda del PSOE debe acudir unida a las urnas para evitar un gobierno de derechas, bajo el liderazgo de la vicepresidenta Yolanda Díaz y el paraguas de Sumar, pero lo cierto es que, en la práctica, no hay todavía diseñado un manual al que deben acogerse los partidos para preparar sus hojas de ruta de cara a los comicios.

Podemos, el partido prioritario a la izquierda del PSOE, presiona cada día a la vicepresidenta con el fin de que «clarifique» su proyecto político. En esta línea la piden que «termine de organizar su partido político» para empezar a negociar con los partidos la futura coalición así como sus términos. Una conversación que no se producirá, en principio, hasta después de las elecciones autonómicas y municipales, como ya publicó este diario, cuando Díaz acabe su proceso de escucha. Estos tiempos desesperan en Podemos, quien apremia a pactar ya una coalición electoral con Sumar. Ayer, la ministra de Igualdad, Irene Montero, lo dejó claro en una entrevista en la Cadena Ser. Le exigió negociar «ya» una posible coalición y dejó claro que su partido no se integrará en Sumar y solo aspiraba a una alianza electoral, como la actual que vive en el Congreso y en el Gobierno de Unidas Podemos.

Esta es así, según las fuentes consultadas en Podemos, una de las líneas rojas que ha trazado el partido como metas a conseguir una vez que se sienten a negociar con el equipo de la vicepresidenta de cara a las próximas elecciones generales. Los morados llevan desde finales de año incidiendo en que buscan un «acuerdo justo» con Sumar, en el que todas las partes se encuentren representadas, como el actual Unidas Podemos. Los de Ione Belarra quieren negociar de «tú a tú» con el partido que finalmente componga la ministra gallega y no diluirse en Sumar. Es, además, una de los planteamientos que tienen claro también el resto de formaciones de izquierda. Por ejemplo, Compromis, que sintoniza con Sumar, ya dejó claro el pasado verano que no iba a perder su identidad.

No es el único de los requisitos que plantea Podemos de cara a la futura negociación con la vicepresidenta. Si bien preferirían empezar cuanto antes a trabajar en la próxima candidatura, las fuentes consultadas en Podemos creen que todavía hay esperanzas y tiempo para llegar a un acuerdo y aseguran que será la única vía posible para la izquierda. Descartan, a día de hoy, la posibilidad de acudir por separado a las urnas, aunque reconocen que habrá aspectos en los que trabajar y que pueden dificultar las negociaciones, como el momento en el que toque pactar las listas electorales para presentarse a las generales en el Congreso y en el Senado. Acordarlas, será otra de las condiciones con Díaz para llegar a un acuerdo. Aunque, otras fuentes aseguran que se trata de «lo común» de cualquier negociación, como los procesos que ahora atraviesa Podemos e IU para el 28-M, donde ambas partes buscan ocupar los primeros puestos de salida según la representación que en la actualidad tienen. Es decir, respecto a las generales, los morados esperan copar los primeros puestos tras Díaz. Especial atención a Madrid donde deben quedar representadas los números uno de cada formación como podría ser Íñigo Errejón por Más País o Irene Montero, por ejemplo, por Podemos. Aunque en la formación, de momento, no se dan pistas sobre los nombres. En cuanto a esta condición, en el entorno de la vicepresidenta se le resta importancia y precisan que «quien quiera se presentará a primarias» y será la militancia la que decida.

Sobre las peticiones de Podemos para empezar a hablar cuanto antes de la futura alianza electoral, la vicepresidenta rechaza sentirse presionada, a pesar de las continuas apelaciones y se hace oídos sordos a estas peticiones. De hecho, a finales de año, frenó las aspiraciones de los morados y se aseguró que será cuando se convoquen elecciones cuando se hablará de este proceso. Fuentes de la dirección de Podemos no se lo creen y esperan que «no alargue» tanto esta situación que, según aseguran, provocaría extender la «incertidumbre» así como dedicar más tiempo «a hablar de la vida interna de las organizaciones y menos de las políticas para mejorar la vida de la gente».

Mientras, Sumar continúa esta semana con su gira. Hoy mismo presentará parte de las propuestas del proyecto de país. Mañana recalará en Tarragona y el sábado en Barcelona junto a la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, que será simbólico, aunque, según aseguran fuentes de Sumar, no será el lugar donde anuncie su candidatura a la presidencia de España.