La Audiencia respalda al juez del "caso Koldo" y mantiene el bloqueo de las cuentas del "conseguidor"

La Audiencia Nacional ha confirmado la decisión del juez del "caso Koldo" de ordenar el bloqueo y embargo preventivo de las cuentas bancarias del empresario Víctor de Aldama, "conseguidor" de la supuesta trama de pelotazos en contratos de suministro de mascarillas en pandemia. La Sala de lo Penal ha desestimado el recurso de apelación presentado por la defensa del supuesto instructor contra la decisión del magistrado Ismael Moreno, que investiga las adjudicaciones de tres ministerios del Gobierno de Pedro Sánchez y de las administraciones balear y canaria a la supuesta trama en torno a Koldo García, hombre de confianza del exministro José Luis Ábalos.

La Sección Segunda mantiene el bloqueo de las cuentas y productos financieros de Aldama al avalar los indicios de la comisión de delitos de pertenencia a organización criminal, blanqueo, cohecho y tráfico de influencias en los hechos investigados y de que el empresario habría "instrumentalizado las cuentas bloqueadas para la comisión de los delitos objeto de investigación". Además, recuerda que, según el juez instructor, el presidente del Zamora CF se habría embolsado por su pale de comisionista en las adjudicaciones bajo sospecha 5,5 millones de euros.

La Sala también ve adecuada la medida para evitar que el empresario intente poner su patrimonio fuera del alcance de la Justicia. Y señala además que la investigación ha puesto de relieve -como recoge el juez Moreno en la resolución recurrida- que Aldama "estaría llevando a cabo una despatrimonialización de sus bienes en territorio nacional", a través de empresas creadas en Portugal gracias a empresarios de su entorno.

El análisis de las cuentas bancarias de Aldama y del también empresario Juan Carlos Cueto, principal comisionista de la "trama", y de los entornos societarios controlados por ambos -recuerda el tribunal- revela "que pudieran estar ocultando su responsabilidad en los hechos investigados" y los "beneficios obtenidos de los mismos".

Por todo ello, los magistrados concluyen que existen indicios de que habría utilizado las cuentas corrientes bloqueadas para "recibir ingresos con origen en las actividades ilícitas investigadas", sin perjuicio de que "el avance de la instrucción fortalezca o debilite estos indicios". En este último caso, matiza, sí se podría replantear el mantenimiento del bloqueo bancario.

La defensa de Aldama se quejó al juez de que los embargos de esas cuentas no estaban justificados, porque según su criterio solo se pueden adoptar medidas cautelares tras la apertura de juicio oral. Además, argumentó que la medida es desproporcionada y que no existen indicios delictivos contra él.