Cerco a la corrupción

Maíllo confirma las presiones de Barberá

Los sms de la senadora centraron ayer el debate en el PP. El secretario de Organización confirma que no hay diferencias con Rajoy: «Las decisiones son a instancia suya».

Un SMS a Maíllo dos horas antes del expediente
Un SMS a Maíllo dos horas antes del expedientelarazon

Los sms de la senadora centraron ayer el debate en el PP. El secretario de Organización confirma que no hay diferencias con Rajoy: «Las decisiones son a instancia suya».

El vicesecretario de Organización del PP, Fernando Martínez Maíllo, confirmó ayer que ha recibido muchos mensajes de la ex alcaldesa de Valencia Rita Barberá, pero eludió entrar en valoraciones de conversaciones privadas. Génova no quiso echar más leña al fuego ni alimentar polémicas, después de que este diario informase de uno de esos SMS en los que Barberá presionaba a la dirección del partido para que no adoptase medidas ni en su contra ni en contra de sus colaboradores en Valencia, investigados en el curso del «caso Imelsa». «He recibido muchos mensajes, pero las conversaciones privadas son privadas», sentenció Maíllo. El responsable de Organización confirmó a Barberá la decisión de investigarla en la tarde del martes. Maíllo también defendió ayer que dentro del PP no existe división respecto a las medidas a adoptar para responder a la corrupción, y confirmó que Rajoy está detrás de la decisión de abrir un expediente disciplinario a Barberá y a todo su equipo, hoy bajo la lupa de la Justicia. «Existe una unidad clara dentro del PP respecto a la lucha contra la corrupción. Un expediente de esta naturaleza es imposible hacerlo sin la instancia del presidente del partido», sentenció, antes de participar en la convención económica que el PP celebró ayer en Madrid. Toda la polémica que acompaña al PP de Valencia y a la situación de Barberá restó alcance al objetivo con el que el PP había preparado esta convención. El interés mediático estuvo más puesto en las valoraciones de los dirigentes populares sobre el expediente disciplinario a la organización valenciana, y sobre el futuro de Barberá, que sobre el mensaje económico que quería «vender» la cúpula popular.

Maíllo valoró las explicaciones de Barberá, quien el martes reiteró su inocencia y aceptó el ofrecimiento del juez de declarar voluntariamente, en la misma línea que el presidente del Gobierno en funciones: «Es tranquilizador porque ella misma está dispuesta a asistir al juzgado». Aunque, según puntualizó, su partido quiere conocer toda la verdad y por eso ha decidido abrir esa investigación interna. El responsable de Organización explicó que será el Comité de Derechos y Garantías el que decida, valorada la situación, si compete tomar medidas adicionales. Ayer por la tarde se reunió para nombrar como instructor a Francisco Molinero, diputado por Albacete. Ni Rajoy ni otros miembros de su Gobierno, como la vicepresidenta en funciones, Soraya Sáenz de Santamaría, valoraron ayer la decisión de poner en marcha la investigación interna sobre el PP de Valencia, paso previo a la expulsión del partido. Sí lo hizo el ministro del Interior, Jorge Fernández, quien defendió que «hay que ser absolutamente contundentes con la corrupción», pero «al mismo tiempo ser justos». «No hay que olvidarse de que hay un principio, que es el de la presunción de inocencia», señaló, informa Ep. Desde Logroño, Fernández Díaz insistió en que hace falta «ser contundentes, sin ninguna mácula, contra las conductas corruptas, que son absolutamente repugnantes y que tanto daño están haciendo a mi partido y a la sociedad».

También se pronunció el vicesecretario de Sectorial del PP, Javier Maroto, quien precisó que se alegra «muchísimo» del expediente abierto por su partido a la ex alcaldesa de Valencia y a los concejales valencianos populares porque se trata de una decisión que «las bases entienden perfectamente». Maroto encabeza la corriente que exige más ejemplaridad. No obstante, el PP cerró filas en la convención económica y negó que existan diferencias con Rajoy respecto a la contundencia a aplicar contra los casos de corrupción que les han afectado: «Las decisiones son a instancia suya».