Protocolo

Trump lejos de Zelenski: así se sentarán los reyes y los jefes de Gobierno en el funeral del Papa Francisco

Al menos, 130 países estarán representado en el Vaticano para despedir al Pontífice fallecido el lunes

Papa.- Más de 128.000 personas visitan la capilla ardiente que ha permanecido abierta casi toda la noche
Papa.- Más de 128.000 personas visitan la capilla ardiente que ha permanecido abierta casi toda la nocheEuropa Press

130 delegaciones internacionales, 50 jefes de Estado y 10 representantes de Casas Reales despedirán este sábado al Papa Francisco en el Vaticano. El protocolo seguirá los procedimientos seguidos para el último adiós al Papa Wojtyla en abril de hace 20 años y el del Papa emérito Joseph Ratzinger en 2023.

El rígido protocolo para el funeral de Francisco este sábado es un delicado trabajo diplomático para evitar situaciones conflictivas que seguirá el orden alfabético en francés, el de la diplomacia, a la hora de asignar los puestos.

El portavoz vaticano, Matteo Bruni, confirmó la presencia de 130 delegaciones, pero podrían ir aumentado durante la jornada y algunos medios hablan de hasta 170, que irán llegando a lo largo de la tarde.

Así es el estricto protocolo

Entre los asistentes confirmados están el presidente de Estados Unidos, Donald Trump y su esposa Melania o el de Argentina, Javier Milei y su hermana, que inevitablemente concitará muchas miradas no solo por el origen argentino del difunto Papa sino por las críticas a su figura que el mandatario argentino le dedicó en el pasado. También estará presente el presidente de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva, que acudirá acompañado de su esposa, informa Efe.

Las delegaciones entrarán a través de los muros vaticanos por la Puerta del Perugino, donde aparcarán los coches para encaminarse a la plaza de San Pedro y entrar por una acceso lateral, donde serán recibidos por el prefecto de la Casa Pontificia Leonardo Sapienza, antes de que el personal del ceremonial pontificio les acompañe a su posición.

Las delegaciones internacionales se colocarán al lado derecho de la plaza mientras que en lado izquierdo estarán los cardenales.

Trump, lejos de Zelenski

El protocolo vaticano indica que las primeras filas están reservadas a los jefes de Estado, pero con prioridad para las delegaciones italiana, la más multitudinaria con la presencia del presidente, Sergio Mattarella, y la primera ministra, Giorgia Meloni;y la argentina, país natal de Francisco, encabezada por Javier Milei y su hermana, frente a los presidentes del Senado y de la Cámara, Ignazio La Russa y Lorenzo Fontana, porque la ceremonia se desarrolla en un país extranjero.

Detrás de ellos se sentarán el presidente del Tribunal Constitucional, Giovanni Amoroso, y el ministro de Asuntos Exteriores, Antonio Tajani, ya que el Papa es también Primado de la Iglesia de Roma, Obispo de la Capital y representante del catolicismo.

Las primeras filas también están dedicadas a las Casas reales católicas, por lo que los Reyes de España serán situados en esa posición junto al resto de monarcas que han anunciado su presencia: Felipe y Matilde de Bélgica, el Gran Duque Enrique y la Gran Duquesa María Teresa de Luxemburgo, los príncipes Alberto y Charlène de Mónaco, y del copríncipe de Andorra, Joan Enric Vives, actual obispo de la Seu de Urgell. Junto a ellos se sentará el Gran Maestre de la Orden de Malta, frey John T. Dunlap. La gran ausente será Máxima de Holanda, que además, de soberana católica es argentina.

A continuación los reyes no católicos como Carlos Gustavo de Suecia y la Reina Silvia, y el Príncipe Guillermo de Inglaterra.

Y luego está el complicado juego diplomático de los presidentes que sigue el orden alfabético francés. Donald Trump, junto a su esposa Melania, se encontrará en la misma fila que el francés Emmanuel Macron, pero muy alejado del ucraniano Volodimir Zelensky, quien ha auspiciado una reunión con el presidente estadounidense, pero que será difícil visto que tiene intención de regresar a su país justo después de la misa.

Entre los primeros puestos también figuran el secretario general de las Naciones Unidas, Antonio Guterres , los representantes de la Unión Europea -con los presidentes del Consejo, de la Comisión y del Parlamento, Antonio Costa, Ursula von der Leyen y Roberta Metsola.

Entre los jefes de Estado más cercanos al altar, siempre en primera fila, estarán los alemanes y austriacos, Frank Walter Steinmeier y Alexander van der Bellen, con sus homólogos albaneses Bajram Begaj y el angoleño João Manuel Gonçalves Lourenç.

También el presidente brasileño, Lula da Silva, junto a la gobernadora general de Canadá, Mary Simon, y los jefes de Estado de Cabo Verde y Chipre, José Maria Pereira Neves y Nikos Christodoulides, así como el presidente de Ecuador, Daniel Noboa.

Un enigma será saber si el expresidente estadounidense Joe Biden , quien confirmó ayer su presencia en Roma debido a su estrecha relación con el Papa Francisco, será incluido en la delegación, pero lo que es seguro es que estará filas de atrás respecto a Trump.

En la tercera fila habrá ministros, otros miembros de las delegaciones y embajadores, como será el caso del representante de Israel ante la Santa Sede, Yaron Sideman.