«No es oportuno. Puedes ser absolutamente imparcial, pero además debes parecerlo», ha afirmado el ex ministro socialista.

El ex ministro de Justicia e Interior socialista Juan Alberto Belloch no solicitará la plaza del juez Eloy Velasco –instructor de los casos «Púnica» y «Lezo» hasta el próximo día 31– por su pasado político. «Mi sentido de la responsabilidad me lleva a no pedirlo. No es lo adecuado», aseguró al ser preguntado por la información de este periódico que ayer apuntaba que sería «uno de los mejor posicionados» si optaba al puesto. Y, efectivamente, Belloch confirmó que, de haber solicitado esa plaza –condición indispensable para obtenerla–, «lo más probable» es que se la hubieran concedido por ser el más veterano y sobre quien podría recaer la responsabilidad. «Mi perfil biográfico y mi puesto de trabajo en el juzgado central no es el adecuado», explicó en una entrevista en el programa «Más de uno» de Onda Cero.

El ex ministro socialista durante el Gobierno de Felipe González cree que, con su llegada a un cargo que investiga a políticos del Partido Popular, «se podría mezclar» su pasado político. «Para cualquier juez es una situación delicada. Imagínese para quien ha sido casi de todo en cargos públicos en el PSOE», apuntó. Su última responsabilidad fue como alcalde de Zaragoza.

Para Belloch, se puede ser «absolutamente parcial» pero además «tienes que parecerlo». «Para juzgar causas en que están implicados dirigentes notorios de ciertos partidos siempre se prestan mecanismos de recusación... creas más problemas que otra cosa», opinó. Es decir, el ex titular de Justicia es consciente de que si le hubieran adjudicado la plaza lo primero que habrían hecho las acusaciones en «Púnica» y «Lezo» es pedir su recusación.

Además, el ex dirigente socialista defendió la decisión tomada por Velasco, después de que éste solicitase al Consejo General del Poder Judicial una plaza en la Sala de Apelaciones, que finalmente le ha sido concedida, un puesto al que se presentó como aspirante el propio Belloch. «La decisión de Eloy es legítima: tiene todo el derecho del mundo. Puede irse a un trabajo que es mas de estudio que de actividad», aseguró. Eso sí, reconoció que «desde el punto de vista del conjunto del sistema no es bueno que se tenga que nombrar a nuevos jueces que tengan que estudiar la totalidad del caso». «Hay que reconocer que es un profesional y tiene derecho a velar por su carrera. No le hago ningún reproche. Crea una dificultad evidente para la instrucción, sólo me limito a constatarlo», remachó.

Preguntado sobre si es posible un cambio de criterio por parte del juez que se encargue ahora de «Lezo» y «Púnica», Belloch dijo que «sería raro» que adoptase esa decisión «sin haber practicado ninguna prueba o diligencia» nueva. Eso sí, explicó que se podría modificar su veredicto si a lo largo de la instrucción aparecen nuevos elementos que «hagan razonable lo que no era razonable antes». «El cambio sin justificar no es correcto ni suele ocurrir», destacó el ex ministro, actualmente destinado en la Audiencia Provincial de Zaragoza.