¿Toque de atención?

Borrell: "Se trata de hacer borrón y cuenta nueva"

Tras reconocer "preocupación" por la amnistía, dice ahora que es "el punto y final de una fase de conflicto"

El máximo representante de la diplomacia comunitaria, Josep Borrell, cambia el tono. "Las amnistías se hacen con este objetivo: históricamente son el punto final de una fase de conflicto que trata de hacer borrón y cuenta nueva. Todas las amnistías tienen este objetivo. Naturalmente, esta también lo tiene". Con estas palabras, ha transmitido este martes un mensaje algo más comedido que el del día anterior cuando, tras ser preguntado por la ley de amnistía, reconoció que los pactos entre el PSOE y los independentistas le causaban "bastantes preocupaciones" y que los que le conocen en España y «saben mi trayectoria personal pueden imaginar lo que pienso».

Después de que el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, asegurase el lunes que "en toda Europa las leyes de amnistía son siempre instrumentos de construcción, convivencia y concordia", añadiendo que "eso es lo que necesita Cataluña y España", Borrell prefirió no entrar en conflicto directo con el Gobierno, si bien sus declaraciones de ese mismo día dan a entender que se está mordiendo la lengua y que está en contra del acuerdo que asegura a Pedro Sánchez los siete votos necesarios en la sesión de investidura.

En este sentido, también quiso dejar claro que no iba a decir «nada más» en relación a esa cuestión «por razones obvias estando donde estoy». Algo en lo que insistió el lunes cuando señaló que era «evidente que no puedo mezclar mi papel con consideraciones personales sobre un problema de política interior española, lo cual no quiere decir que no tenga mi opinión y que en algún momento la expresaré, porque tengo pleno derecho a hacerlo, sin involucrar a las instituciones europeas».

En todo caso, todo indica que la ley de amnistía ha entrado de lleno en el debate europeo, como prueba que la primera pregunta –el lunes– a Borrell no fuera realizada por un periodista español y todo indica que seguirá acaparando la atención en los próximos meses.

De momento, el grupo del Partido Popular Europeo en la Eurocámara ha pedido incluir en la agenda del pleno de la semana que viene un debate sobre el riesgo para el Estado de derecho en España. Aunque será la conferencia de presidentes de la Eurocámara –formada por los líderes de los grupos políticos– la encargada de dar luz verde a esta petición mañana, el veredicto será positivo, ya que corresponde a los populares introducir un tema en la agenda.

En una declaración conjunta, el líder del Partido Popular Europeo, el alemán Manfred Weber y la jefa de los populares españoles, Dolors Montserrat, ya advirtieron de que esta nueva ley supone «el riesgo de violar la separación de poderes y minar la independencia judicial». En este tipo de debates siempre acude un representante de la Comisión Europea, por lo que deberá producirse un pronunciamiento por parte del Ejecutivo comunitario que estará sujeto al desarrollo de los acontecimientos durante los próximos días y a la información que obtenga por parte del Gobierno español.

Las delegaciones del PP y Cs en la Eurocámara han remitido una carta a los principales dirigentes europeos en la que explican que este acuerdo «marca el inicio de una era de desestabilización política y una clara degradación de los fundamentos mismos del Estado democrático de derecho». La misma misiva no solo alerta sobre la amnistía para beneficiar a los responsables del desafío independentista, sino que apunta a la parte del acuerdo que propone la creación de comisiones parlamentarias y abre la puerta a estudiar si se ha producido «lawfare».