Entrevista

Carmen Fúnez: "Tenemos plena confianza en que la UE parará la amnistía"

La nueva vicesecretaria de Organización del PP detalla los contactos que mantienen en Bruselas y las razones que les llevan a confiar en la Unión Europea frente al pacto Sánchez-Puigdemont

¿Estamos ya ante el PP de Feijóo después de los últimos cambios orgánicos?

El PP de Feijóo empezó con su llegada a Madrid en abril del año 2022. Además, con ese PP de Feijóo se ganaron las elecciones municipales, se ganaron las elecciones autonómicas, se consiguió una mayoría absoluta en las elecciones andaluzas y hemos ganado las elecciones generales. Ahora sólo hemos ampliado el equipo para adaptarnos a la nueva realidad. Gobernamos en 12 comunidades autónomas y en Ceuta y Melilla, gobernamos en más de 3.000 ayuntamientos y en muchas diputaciones provinciales y, por lo tanto, nuestra posición como partido de gobierno se ha consolidado. Y además, a pesar de haber ganado las elecciones generales no gobernamos, pero sí somos primera fuerza política en el Congreso de los Diputados, somos la fuerza mayoritaria con mayoría absoluta en el Senado y, muy importante, somos el único partido de ámbito nacional que defiende con firmeza el interés general del Estado.

De la renovación, lo más llamativo es la apuesta por hacer crecer la estructura con la incorporación de mujeres, como ya ha hecho Pedro Sánchez.

No se incorporan por ser mujeres, se incorporan porque son personas capaces, que van a poner todo su conocimiento y su experiencia al servicio del partido.

¿Piensa lo mismo de las mujeres que forman parte del equipo de Pedro Sánchez?

Sí, no entiendo por qué no voy a pensarlo. La diferencia con el PSOE es que no vamos a justificar nuestro feminismo por el número de mujeres que estén en nuestros gobiernos o en la dirección del partido ni las vamos a utilizar para tapar iniciativas dañinas para las mujeres, como la ley del sí es sí. Nuestro feminismo lo demostramos con las políticas que estamos poniendo en marcha en aquellos lugares donde gobernamos y también con las iniciativas parlamentarias que presentamos.

¿Le molestan los intentos de Vox por recortar esas políticas de igualdad en las comunidades donde gobiernan en coalición?

Cada uno es dueño de sus palabras y de sus planteamientos políticos, y es un hecho que en aquellas comunidades autónomas donde gobernamos no ha habido recorte de políticas de igualdad, sino que se ha ampliado el presupuesto. La igualdad no solo hay que proclamarla, sino que hay que convertirla en realidades concretas en la vida de las mujeres, y hoy, en España, hay el doble de paro femenino que en el resto de países de la Unión Europea. Todavía son muchas más las mujeres que tienen que renunciar a su desarrollo profesional por el cuidado de menores o por el cuidado de mayores, y eso supone un lastre para ellas, pero también para la sociedad española porque cuando una mujer da un paso atrás y pide excedencia en su trabajo, excedencia voluntaria, pero la pide ella habitualmente y de manera mayoritaria, esa mujer pierde en su desarrollo profesional, pero también está perdiendo la sociedad española en conocimiento y en competitividad. Las políticas de igualdad que se necesitan no son las de las grandes proclamas o las políticas sectarias que han hecho del feminismo un movimiento de enfrentamiento de unos contra otros, sino que hay que bajar al terreno, ponerse en la piel de las mujeres. Y ése es el feminismo en el que trabajamos en los Gobiernos de las comunidades autónomas y de los ayuntamientos.

Dice que en las comunidades donde gobiernan en coalición con Vox no se han producido ningún recorte. La izquierda sostiene lo contrario y parece que ha sido eficaz a la hora de conseguir esa identificación del PP y de Vox, la derecha y la extrema derecha. De hecho, ese relato de la identificación ayudó a que no se cumplieran las expectativas del PP en las elecciones generales.

Al final los relatos son cuentos y nosotros no somos un partido de relatos ni de estrategias. Somos un partido de convicciones, de principios y de gestión. A corto plazo, el relato puede servir, pero a medio plazo se cae por la vía de los hechos. Le pongo un ejemplo, el Gobierno de Castilla y León ha puesto en marcha un programa de ayudas para la contratación de mujeres víctimas de violencia de género que dota a cada empresario, a cada autónomo que contrate a una mujer víctima de violencia de género, con 10.000 euros.

Cualquier experto en materia de violencia machista explica que la empleabilidad es uno de los principales problemas que tienen las mujeres, porque una mujer sin empleo no se atreve a denunciar. En la Comunidad Valenciana el presupuesto de fondos europeos destinado a violencia machista solo se había ejecutado en un tres por ciento cuando Carlos Mazón llegó a la Presidencia y ahora estamos implementando programas para ejecutar todo el presupuesto. El feminismo no consiste en un relato o en propaganda porque al final eso no transforma la vida de las mujeres y nosotros creemos más en la política a medio plazo: la del corto plazo se la dejamos a Sánchez.

¿Usted se identifica como feminista?

Sí. Soy feminista y estoy absolutamente comprometida con la igualdad entre mujeres y hombres, pero no quiero que nadie me ponga etiquetas. En la última legislatura la izquierda se empeñó en hacer del feminismo un movimiento excluyente, y es un auténtico error que ha hecho mucho daño. El feminismo no va de mujeres contra hombres, sino de mujeres y hombres unidos contra los muros que limitan el desarrollo de las mujeres en nuestro país. En España todavía hay derechos que tenemos que consolidar y conseguirlo beneficiará a toda la sociedad. Y nuestro principal problema es que tenemos un presidente del Gobierno que está empeñado en etiquetar y en dividir a la sociedad entre buenos y malos, entre más feministas o menos feministas, dependiendo del nivel de cercanía que tengan con él.

Entrevista con Carmen Fúnez, Vicesecretaria de Organización del PartidoPopular / © Alberto R. Roldán.
Entrevista con Carmen Fúnez, Vicesecretaria de Organización del PartidoPopular / © Alberto R. Roldán.Alberto R. RoldánFotógrafos

¿El discurso que hace Vox es machista?

Si estoy criticando a Sánchez por colgar etiquetas a todo el mundo yo no voy a hacer lo mismo. Ahora, tampoco me hago responsable de lo que piensen otros. Utilizaría algunas de las expresiones que utiliza Vox para hablar de violencia machista? No, como tampoco alguna de las que utiliza el PSOE. Nosotros tenemos nuestro programa y creemos que en la lucha contra la violencia machista hay que unir a toda la sociedad, como ocurrió en 2017 con el pacto de Estado que firmamos todos los partidos.

Cuando hablas con víctimas de violencia machista, te cuentan que no denuncian por miedo a sentirse solas y a que la sociedad dude de su palabra. La única manera que tenemos de responder a esto es uniendo todas nuestras voces, sin generar debates, trabajar a nivel interno para que cuando nazca una propuesta lo haga con el mayor de los consensos. Cuando salimos a la calle debemos hacerlo con una voz única.

¿Cuáles son las prioridades de este nuevo equipo en este contexto político?

La principal prioridad es defender el marco constitucional y terminar con una ley de amnistía que nos hace desiguales ante la ley. El PP tiene hoy una enorme responsabilidad, que es ser la voz y el partido que defienda el interés general del Estado y de todos los españoles, y tenemos que ser también, por supuesto, el partido que defienda la Constitución. La Constitución no solo hay que celebrarla, sino que, por desgracia, hay que defenderla de Sánchez y de sus socios, que están dispuestos a sacrificarla para mantenerse en Moncloa. Nunca antes habíamos tenido un presidente del Gobierno tan alejado de la Constitución.

¿Hasta dónde cree que puede llegar la negociación con Puigdemont?

Hasta dónde quiera Sánchez para seguir manteniéndose en Moncloa, porque Puigdemont tiene claro a dónde quiere llegar y, además, lo ha expresado claramente, su meta es un referéndum de autodeterminación, y la meta de Sánchez es seguir en La Moncloa. Otra cuestión es el precio para hacerlo. Recordamos las declaraciones de Sánchez en campaña, y de otros miembros del gobierno, diciendo que no habría amnistía ni verificadores y, sin embargo, han tragado con todo, con la amnistía, con los verificadores, con Rodalies y con la condonación de una deuda de 15.000 millones de euros.

¿El PP debe llegar a acuerdos con PNV y Junts en el Congreso para frenar la política de la coalición?

Es que Junts y PNV forman parte de la coalición. No percibo ahora mismo una política distinta entre Junts, PNV, el Partido Socialista, Sumar, ERC y Bildu.

En temas económicos, fiscales, apoyo a grandes empresas, sí hay diferencias.

Hay que ajustarse a los hechos, y la primera proposición de ley que se ha registrado en el Congreso ha sido por parte del Grupo Socialista y es la ley de amnistía. Ahí empieza la deconstrucción del Estado constitucional. Y ahí es donde el Partido Popular tiene que plantar cara.

Pero al margen de esa batalla, ¿el PP está dispuesto a llegar a acuerdos puntuales con el PSOE en otras materias o ésta será la Legislatura del «no» a todo por la negociación con Puigdemont?

Hasta ahora, quien ha marcado con un «no» a todo el que no piense como él ha sido Pedro Sánchez, como vimos en el debate de investidura. Nosotros vamos a defender el interés general del Estado y eso significa, lógicamente, tender puentes y no construir muros.

No acaba de quedarme claro. Entonces, ¿sí puede haber acuerdos?

Dependiendo de los acuerdos a los que haya que llegar y de las condiciones que se den en cada momento, pero teniendo muy claro que no vamos a tragar con las exigencias independentistas. Nosotros vamos a respetar las bases del Estado constitucional desde la primera palabra a la última. Los principios constitucionales son incuestionables.

¿Qué espera de la reunión a la que ha convocado Sánchez a Feijóo para hablar de la renovación del Poder Judicial y de la financiación autonómica?

Sánchez lleva sin llamar al presidente Feijóo desde hace meses. El PP ganó las elecciones municipales y autonómicas y Sánchez no llamó al presidente Feijóo para felicitarle como ganador. También ganó las elecciones generales y Sánchez no le llamó para felicitarle como ganador de los comicios. Lo que hemos conocido hasta ahora es que, a través de los medios, Sánchez ha dicho que tiene intención de llamar a Feijóo para convocarle a una reunión, pero dicho encuentro aún no se ha convocado. Al final, no sé si ésta convocatoria debe pasar por el filtro de la mesa de seguimiento que está celebrándose en Ginebra. La realidad es que es muy difícil que sea compatible una mesa en Ginebra de control al Gobierno de España y que, al mismo tiempo, ese seguimiento y control se pueda estar ejerciendo desde las Cortes Generales. Sánchez tiene un problema, porque ambas mesas no son en absoluto compatibles.

Entrevista con Carmen Fúnez, Vicesecretaria de Organización del PartidoPopular / © Alberto R. Roldán.
Entrevista con Carmen Fúnez, Vicesecretaria de Organización del PartidoPopular / © Alberto R. Roldán.Alberto R. RoldánFotógrafos

¿Pero ve posible la renovación del CGPJ?

Hace un año vivimos una situación parecida. Cuando Feijóo llegó a la presidencia del partido le ofreció a Sánchez un pacto por la Justicia, donde entraba la renovación del CGPJ y la aprobación de una ley para que los jueces elijan a los jueces. Al final, mientras se estaban produciendo estas reuniones, en las que el representante del PSOE era Bolaños, el propio Bolaños nos mintió sentándose de manera paralela con los independentistas. Con nosotros pactaba la despolitización de la Justicia y con los independentistas estaba utilizando la Justicia como pago político. Esta situación, en el Gobierno actual, no solo no ha desaparecido, sino que se ha acentuado. A Sánchez se le ha caído la careta, porque no puede mentir a todos durante todo el tiempo. No es posible esperar grandes acuerdos cuando el diálogo político en España está en torno a estos términos por parte del Gobierno.

Por cierto, ¿qué confianza tiene en que la Unión Europea frene la ley de amnistía?

Toda, porque si el Estado de Derecho se debilita en España lo hace también en la UE. Hemos recurrido a la UE porque tenemos muy claro que la ley de amnistía hay que pararla dado que rompe la igualdad de los españoles ante la ley y supone la venta de nuestro Estado de derecho. La ruptura de la separación de poderes es el precio que Sánchez ha pagado para estar en el Palacio de La Moncloa y, por lo tanto, nosotros, desde el primer momento, dijimos que íbamos a utilizar tres vías para bloquear esta ley: la legal, la europea e institucional, y la de la calle. Y eso es lo que estamos haciendo.

¿Con quién están hablando en Bruselas?

Formamos parte del PPE y nos hemos puesto en contacto con algunos de sus miembros como Ursula Von der Leyen y Roberta Metsola. Con el Partido Popular Europeo y con los responsables en el ámbito de la Justicia que nos proporciona el Partido Popular Europeo.

¿Qué le pareció la amenaza de Vox de romper con el PP a nivel nacional, pero no en las comunidades?

No he entendido lo que quieren decir.

¿Les ve descolocados?

Cada partido político tiene su hoja de ruta y el Partido Popular tiene la suya, tiene su calendario de trabajo, tiene sus prioridades y tiene su línea programática, y a eso nos dedicamos. Y me imagino que Vox tendrá la suya. Lógicamente, el PP no quiere marcar la agenda de Vox, pero en el PP tampoco permitimos que ningún otro partido marque la nuestra.

¿Se identifica con el ala moderada del PP?

No creo que haya ni ala moderada ni ala dura. Todos compartimos una serie de valores. Yo creo que se puede hacer oposición con firmeza, pero también con mesura, y dentro no nos clasificamos en moderados y duros.

El señor Tellado le dejó el partido muy ordenado, salvo el PP catalán. ¿Los movimientos de Alejandro Fernández para mantener la Presidencia regional acabarán dando efecto?

Cataluña nos preocupa como proyecto de país porque es uno de los precios que Sánchez pretende pagar por estar en el Palacio de La Moncloa, a costa de un pacto con los independentistas y olvidándose por completo de los constitucionalistas. Sánchez ha traicionado al constitucionalismo y el PP tiene que responder ante ellos y defender sus intereses. Las cuestiones internas del partido se van a ir dilucidando sin ningún género de dudas, pero lo importante es la responsabilidad que tenemos en este momento ante esos constitucionalistas catalanes que solo tienen de su lado al PP.

¿Alejandro Fernández es una persona adecuada para responder a ese reto?

Es el presidente del Partido Popular, es nuestro portavoz en el Parlament y está llevando a cabo una buena labor parlamentaria, pero lo importante es dar una respuesta a los constitucionalistas catalanes, que solo tienen en el PP la vía para defender sus derechos y su libertad.