Elecciones 24-M

Las dimisiones «éticas» de Pedro Sánchez

La Razón
La RazónLa Razón

Recientemente, el embajador de España en Londres, Federico Trillo, y el portavoz de Economía del Partido Popular en el Congreso, Vicente Martínez Pujalte, reconocían haber cobrado por asesorar a una constructora siendo diputados. Pujalte manifestó en una entrevista radiofónica realizada por Pepa Bueno que consideraba esta actividad «legal», aunque «no ética». Tras estas declaraciones, el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, aseguró que «si lo que han hecho Pujalte y Trillo es legal pero no ético, deben abandonar sus cargos» y que «no sirve escudarse en la legalidad si no es ético».

Sánchez ha defendido en reiteradas ocasiones que los parlamentarios sólo deben compatibilizar su cargo con actividades privadas como cursos, conferencias, clases o participación en medios de comunicación sin aceptar ninguna remuneración por ello.

Durante estos días desde las filas socialistas han sido muchas las voces que han surgido defendiendo la importancia de la ética en política y la exclusividad de los cargos, empezando por el propio Antonio Hernando, quien ha tachado de «inmorales» los comportamientos de Pujalte y Trillo y solicitado al PP su cese inmediato. «Es radicalmente opuesto a lo que tiene que ser la política y a lo que defiende el PSOE», dijo por su parte María González Veracruz, diputada socialista y miembro de la ejecutiva de Sánchez, para quien «el reproche es ético». «Nuestro planteamiento es tajante tanto con el régimen de incompatibilidades como con la transparencia. El espectáculo que está dando el PP es perjudicial para toda la democracia», dijo la parlamentaria.