Los Mossos creen que la orden de la Fiscalía de precintar escuelas acarreará problemas de orden público

La Policía Autonómica ve con preocupación la medida y teme problemas de orden público.

Cada día que pasa parece más difícil la celebración del referéndum ilegal y anticonstitucional que planea la Generalitat para este domingo. Después de las más que efectivas operaciones policiales de los últimos días, ayer se sumó una nueva orden de la Fiscalía Superior de Cataluña.

El Ministerio Público catalán ordenó a los Mossos d’Esquadra que precinten, antes de este sábado, las escuelas designadas como puntos de votación de cara al hipotético referéndum ilegal. También pidió la Fiscalía que se impida votar en la calle en un radio de 100 metros, y desalojar a las personas que estén dentro.

En esta instrucción del fiscal superior catalán, José María Romero de Tejada, que se trasladará oficialmente hoy en la reunión con los mandos policiales, se pide identificar a las personas que estén en los centros y participantes en la ocupación, y que se incauten especialmente urnas, equipos informáticos, papeletas, documentación y propaganda.

vigilancia

El fiscal también pide a los Mossos que vigilen la integridad de los precintos hasta las 21:00 horas del domingo, de que le informen de si hay casos en que se rompe dicho precinto, y, si es así, volver a ponerlos e identificar a las personas que lo hubieran hecho.

La instrucción también establece que los Mossos «podrán requerir el auxilio y colaboración de las policías locales», y si no es suficiente, de la Guardia Civil y de la Policía Nacional.

Los Mossos reaccionaron. Concretamente, se mostraron preocupados por esta orden de la Fiscalía, al considerar que ese dispositivo puede provocar problemas de orden público. Los máximos mandos de la Policía Autonómica se reunieron ayer por la tarde para analizar la orden de la Fiscalía. Su conclusión fue podrían haber complicaciones con el orden público. No obstante, hasta el momento los Mossos siempre han acatado las órdenes del Ministerio Público.

Por otra parte, los Mossos, acatando también una orden del Ministerio Público, comenzaron a acudir ayer a los centros escolares catalanes en los que está previsto que se acojan urnas de cara al referéndum ilegal. El objetivo, en la línea de lo reclamado por la Fiscalía, era identificar e interrogar a los responsables de esos colegios y requisar el material que puedan haber recibido para el 1–O, como por ejemplo urnas y ordenadores. Los agentes de la Policía Autonómica efectivamente se personaron en algunos centros, con un «requerimiento de información», y preguntaron a los responsables de los locales si recibieron instrucciones sobre el 1–O. Hubo varias identificaciones.

Los agentes también comunicaron a los responsables de los locales que, teniendo en cuenta las instrucciones de la Fiscalía, la entrega de llaves del recinto para el referéndum ilegal «podrá ser considerado un acto de colaboración», con los delitos de prevaricación, desobediencia y malversación, por lo que se daría lugar a responsabilidades civiles y también penales.

Después de que el lunes renunciara asistir a la reunión de altos mandos policiales en la Delegación del Gobierno, el mayor de los Mossos, Josep Lluís Trapero, acudirá hoy al encuentro previsto en la Fiscalía Superior de Cataluña.

Romero de Tejada convocó una nueva reunión de coordinación con los mandos de la Guardia Civil y Policía Nacional en Cataluña, y Mossos, sobre el dispositivo policial del referéndum.

Esta cita llega después de la reunión operativa dirigida por el director de Gabinete de Coordinación y Estudios de la Secretaría de Estado de Seguridad, el coronel Diego Pérez de los Cobos, a la que acudió el comisario de los Mossos Ferran López.