Esta es la multa de la DGT de hasta 1.000 euros por cruzar la carretera cuando el semáforo está en rojo

Existe la percepción generalizada de que las multas de tráfico están dirigidas únicamente a los conductores, mientras que los peatones parecen estar exentos de estas sanciones. Esta percepción es alimentada por el hecho de que los peatones suelen ser percibidos como las víctimas potenciales en accidentes de tráfico y no como sus causantes.

Sí que es cierto que una infracción de tráfico cometida por un vehículo a motor es notablemente más peligrosa que cualquier infracción que pueda cometer un peatón. Por ese motivo, la mayor parte de las sanciones, así como la educación vial al respecto, se orienta hacia los conductores. Sin embargo, el hecho de que las infracciones cometidas por los peatones, así como sus respectivas sanciones, sean menos visibles… no significa que no existan.

Los peatones también tienen la responsabilidad de mantener la seguridad vial y, por lo tanto, también enfrentan consecuencias legales por violar las normas de tráfico. La Dirección General de Tráfico contempla varias infracciones que pueden realizar los peatones y que pueden ser merecedoras de una sanción económica. Algunas de estas infracciones son menores, pero también existen algunos casos en los quela multa podría ascender incluso hasta los 1.000 euros.

¿Cuál es la multa por cruzar un semáforo en rojo?

La infracción más común por la que un peatón podría recibir una sanción económica es cruzar por la calzada por un lugar no habilitado para ello. Es una costumbre muy extendida y que puede ser muy peligrosa. De hecho, esta es una de las causas más comunes de los más de 10.000 atropellos en zona urbana que tienen lugar cada año en nuestro país. Por eso, si un agente de tráfico nos pilla cruzando la carretera sin utilizar un paso de cebra, es posible que nos pueda imponer una sanción de hasta 80 euros.

En cuanto a lo de cruzar la calle utilizando el paso de cebra, pero haciéndolo cuando el semáforo está en rojo, está peor considerado que simplemente no utilizar el paso de cebra, porque la sanción que acompaña a esta infracción podría ascender hasta los 200 euros. Además, existen otros comportamientos cometidos por peatones que pueden ser sancionables:

Otras sanciones para los peatones

Caminar por vías prohibidas

Caminar por vías diseñadas para la circulación de vehículos a alta velocidad, como autopistas o autovías, no solo está prohibido, sino que es un error grave que puede tener consecuencias más allá de una multa. Las altas velocidades de los vehículos reducen el tiempo de reacción de los conductores, lo que multiplica el riesgo. Por tanto, ingresar a estas vías como peatón es una infracción que puede resultar en una multa de 80 euros.

No utilizar el chaleco reflectante

Antes comentábamos que los peatones no pueden andar por autovías y autopistas. Sin embargo, hay una excepción legalmente permitida que muchos podrían haber pasado por alto: en caso de avería del vehículo. Si el conductor tiene que salir del vehículo para colocar los triángulos en la calzada y no lleva un chaleco reflectante, podría enfrentar una multa de 200 euros.

Además, los peatones deben prestar atención a un cierto artículo del Reglamento General de Circulación. Según este artículo, "Fuera del poblado, entre el ocaso y la salida del sol o en condiciones meteorológicas o ambientales que disminuyan sensiblemente la visibilidad, todo peatón, cuando circule por la calzada o el arcén, deberá ir provisto de un elemento luminoso o retro reflectante homologado". El incumplimiento de esta norma puede resultar en una multa de 100 euros.

Caminar por el lado incorrecto de la carretera

Cuando caminamos en calzadas fuera de poblado, donde los coches van bastante rápido, es importante que obedezcamos a la normativa porque puede ser muy peligroso. Una de estas normas que siempre debemos obedecer es la de caminar por el lado la izquierda de la carretera, de forma que veamos a los vehículos que vienen de frente. La multa por no hacerlo es de 100 euros.

Caminar muy despacio

En nuestro país, los peatones tienen prioridad sobre los coches, porque son los usuarios más vulnerables de la vía. Ahora bien, esto tampoco le da carta blanca a los peatones para molestar deliberadamente a los conductores. Caminar extremadamente despacio (si no hay una causajustificada, claro) al cruzar el paso de cebra no sólo es tremendamente irrespetuoso, sino que también está considerado una infracción que podría costarnos 80 euros.

Negarse a someterse a un control de alcoholemia

Los controles de alcoholemia suelen ir dirigidos únicamente a los conductores, porque ellos son los que más daño pueden generar. Pero también puede darse el caso de que algún peatón se haya visto implicado en algún accidente, en cuyo caso será normal que las autoridades le soliciten superar un control de alcoholemia. Si el peatón se niega a realizarlo, se expone a recibir una multa de 1.000 euros.