Política

Jerusalén

Margallo explora vías para la paz

El ministro de Asuntos Exteriores, García-Margallo a su llegada a Jordania, ayer
El ministro de Asuntos Exteriores, García-Margallo a su llegada a Jordania, ayerlarazon

Comienza hoy una gira por Israel y Palestina en la que se verá con Netanyahu y Abbás

Basta un rápido vistazo a la agenda de encuentros que García Margallo mantendrá durante la gira por Oriente Próximo que comienza hoy para constatar que el peso de España en la escena internacional parece haber experimentado un nada desdeñable salto hacia adelante en los últimos dos años. En 2012 el país estaba sumido en un crisis cuyo final no podía tan siquiera atisbarse. Hoy España, la economía de peso que más crece en la zona euro, ya no es parte del problema sino, o al menos así lo pretende Margallo, de la solución. El jefe de la diplomacia española aprovechará su presencia en un Oriente Próximo más caldeado incluso que de costumbre para suscitar que se reabran las conversaciones de paz entre israelíes y palestinos, que llevan cerradas desde abril de 2014. Nuestro estatus de miembro no permanente del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas, órgano de la ONU en el que se toman decisiones vinculantes en materia de seguridad y mantenimiento de la paz, viene a reforzar la capacidad de influencia de España en esta área geográfica, la más conflictiva del planeta.

Y volviendo a la agenda de encuentros de Margallo durante esta gira, y por resumirla de forma concisa, diremos que el titular de Exteriores se va a reunir con todo el mundo. Ayer aterrizó en la capital de Jordania, Amán, donde hoy está previsto que sea recibido por el rey Abdallah II (aunque puede que sea aplazado), el primer ministro, Abdullah Ensour y el ministro de Asuntos Exteriores, Nasser Judeh. García-Margallo aprovechará su estancia en Amán para inaugurar la nueva sede de la embajada de España en Jordania. Hoy mismo tendrá lugar, a las 17:30 hora española, el encuentro del ministro Margallo con Mahmud Abbas, presidente palestino.

Al día siguiente, mañana lunes, el titular de Exteriores se trasladará a los Territorios Palestinos, concretamente a Ramala, donde tendrán lugar sendos encuentros con el primer ministro palestino, Rami Hamdalá, y el jefe de su diplomacia, Riad al Malki. Será mañana por tanto cuando España y Palestina firmen el Acta de la Comisión Mixta de cooperación que incluye el Marco de Asociación-País España Palestina por el que ambos países regularán los criterios en los que se basará la cooperación al desarrollo de nuestro país en los Territorios Palestinos.

El lunes por la tarde, García -Margallo pondrá rumbo a Israel, concretamente a Jerusalén. Desde allí el titular de Exteriores se desplazará a la Franja de Gaza, donde visitará los barrios más afectados por la ofensiva israelí lanzada el año pasado sobre este bastión de Hamas. García-Margallo estará acompañado por el comisionado general de la Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNWRA) y visitará un centro de desplazados y una escuela gestionada por personal de Naciones Unidas, proyectos ambos que han recibido apoyo financiero de la Cooperación Española.

La cuarta y última jornada de la gira tendrá lugar en Jerusalén, la ciudad considerada santa por las tres principales religiones monoteístas, judaísmo, cristianismo e islam. Margallo tiene programados encuentros con el primer ministro, Benjamin Netanyahu, el presidente de Israel, Reuven Rivlin, y ministro de Exteriores, Avigdor Lieberman.

El ministro de Asuntos Exteriores, por tanto, va a tener la posibilidad de hablar con los más altas autoridades no sólo de los dos principales contendientes en el conflicto, Israel y Palestina, sino con un país clave en la zona, Jordania, que durante 2015 también tendrá, al igual que España, un sillón en el Consejo de Seguridad y que el pasado 30 de diciembre presentó una propuesta en este órgano en nombre de Palestina que no prosperó. La vía que García- Margallo defenderá para resolver este conflicto no es ningún secreto: España cree que la única solución «posible, justa y duradera» pasa por la existencia de dos estados basados en las fronteras de 1967 y con capital conjunta en Jerusalén.