Críticas

Ángela Rodríguez Pam quiere ahora que haya "más gordos" en el Congreso

La número dos de Irene Montero asegura que no hay personas gordas en política porque se rigen por "una serie de cánones físicos"

La ministra de Igualdad, Irene Montero (i), y la secretaria de Estado de Igualdad, Ángela Rodríguez 'Pam' (d)
La ministra de Igualdad, Irene Montero (i), y la secretaria de Estado de Igualdad, Ángela Rodríguez 'Pam' (d)Marta Fernández JaraEuropa Press

Lo ha vuelto a hacer. La secretaria de Estado de Igualdad, Ángela Rodríguez Pam, ha cargado contra todos aquellos quela descalifican por el hecho de ser "gorda y fea" y ha compartido una reflexión, que no ha dejado a nadie indiferente. La número dos de la ministra de Igualdad, Irene Montero, ha manifestado en un podcast compartido en sus redes sociales que, al principio, "dedicaba mucho tiempo a pensar cuantas personas gordas había en el Congreso" y que su conclusión siempre era la misma: "No hay". Y si bien señala que hay algunos hombres, "no es lo habitual".

De este modo, Rodríguez Pam criticaba que no haya más personas gordas en la Cámara Baja. A su juicio, esto se debe a que la mayoría de los políticos, incluidos sus compañeros y compañeras de partido, "encajan en una serie de cánones físicos", que nada tienen que ver con el sobrepeso.

Defiende que las "mujeres con cuerpos diversos", como ella, "tienen que saber que también tienen derecho a estar en el espacio público y a ocupar el poder". Asimismo, reconoce que si bien antes restaba importancia a estos descalificativos por ser "gorda y fea", llegó un punto en el que esta situación cambió. Tras reconocer que acude al psicólogo, asegura que éste le hizo ver que "a ningún ser humano le gusta que le agredan".

En un momento de la entrevista, la secretaria de Estado de Igualdad, relata que durante muchos años sufrió un trastorno de la conducta alimentaria (TCA) que le ha hecho tener una relación "compleja" con su cuerpo y confiesa que exponerse públicamente con todo lo que ello implica no fue sencillo. "¿De verdad es tan problemático mi cuerpo para no merecer estar en el espacio público?", se pregunta, no sin antes volver a hacer hincapié en la falta de diversidad política y los cánones preestablecidos.

Consciente de que sus palabras tendrán repercusión, como viene siendo habitual, Rodríguez Pam insiste en que su puesto de responsabilidad le obliga a advertir de que "los TCA y los problemas de salud mental vinculados a éstos no han dejado de crecer entre las más jóvenes especialmente como consecuencia de muchos contenidos que en redes sociales se presentan tan atractivos como nocivo".

Por ello, la podemita destaca que "todos los cuerpos son válidos" y que, de lo contrario, "estaríamos asumiendo, por ejemplo, que la representación de la ciudadanía y el ejercicio de nuestros derechos políticos, está limitado a quien encaja en un canon de determinado".