Ofensa a los agentes

Interior despilfarra 626.247 euros en gabardinas para los mandos de la Policía Nacional

Pese a la necesidad de chalecos antibalas, guantes anticorte o pistolas táser para los agentes, el Gobierno "prioriza" la compra de 1.830 unidades de gabardinas

Contrato de licitación para la compra de gabardinas para los mandos de la Policía Nacional
Contrato de licitación para la compra de gabardinas para los mandos de la Policía NacionalLa Razón

Ni chalecos antibalas para los agentes, ni guantes anticorte, ni pistolas táser... la prioridad para la Dirección General de la Policía (DGP) son "las gabardinas" de los altos mandos. El Ministerio del Interior, que dirige Fernando Grande-Marlaska, destinará 626.247 euros a la compra de 1.830 gabardinas para "proteger a los mandos del frío y la lluvia en actos oficiales".

Según explican desde la Confederación Española de la Policía (CEP), esas gabardinas serán solo para los policías de la Escala Superior e inspectores jefe. En concreto, 1.200 para hombres (aunque hay 1.628 compañeros de ese sexo) y 630 para mujeres. Así consta en la licitación, que incluye, además, 1.611 pares de divisas para esa prenda. De éstas, seis pares serán para el Director Adjunto Operativo; 15 para los tres subdirectores generales; 30 para los once jefes de División y comisarios generales y 60 para los veinte jefes superiores.

Pero más allá de las cifras, desde este sindicato policial ironizan con la idea de quién puede haber considerado que esta prenda de vestir es "imprescindible". Apuntan que la orden ministerial que regula la uniformidad de los policías nacionales data de 2014 y en ella no figura la gabardina. "A lo mejor alguien ha tardado una década en darse cuenta de que esto era imprescindible y se les olvidó en su día", señalan desde la CEP. Y se preguntan si los jerseys o cazadoras corporativas que ya están incluidas en su dotación "no son suficientes para abrigar en los actos oficiales". Y en este punto cuestionan que esta decisión vaya más allá de abrigar a los mandos y que el motivo real sea "estético".

Reparto del lote de gabardinas, según figura en el contrato de licitación
Reparto del lote de gabardinas, según figura en el contrato de licitaciónLa Razón

Y ponen sobre la mesa un dato, cuanto menos relevante. Y es que ni siquiera han licitado gabardinas para todos los inspectores jefe, por lo que parece que diferencian entre compañeros "de primera y de segunda". Pero lo que más indigna a los agentes es la escala de prioridades de Interior porque "en este Cuerpo hacen falta todavía muchas cosas" y lo primero, a su juicio, "es lo que salva vidas". Desde la CEP insisten en que "lo urgente es lo que protege a quien se la juega en la calle. Que lo imprescindible es lo que refuerza la seguridad de los compañeros y compañeras" y si hay presupuesto para eso, entonces, "adelante con todo lo demás".

Los "trucos" y estrategias de Interior

Aunque en esto de las licitaciones tampoco hay que "fiarse" mucho de Interior, a tenor de su último "truco": comprar material a cuatro años para maquillar los datos, mientras sigue incumpliendo la Ley de Riesgos Laborales. Es justo lo que ha ocurrido con la anunciada adquisición de 4.760 chalecos integrales de orden público". Lejos de dotar a los agentes de medios para proteger sus vidas, en un momento en el que las agresiones a los policías se han disparado, decidieron dividir esta adquisición cuatro años (2025-2028). De este modo, de aprobarse esta licitación, cuyo valor total asciende a 8,6 millones de euros, sólo se distribuirían 1.190 unidades al año.

Desde la Confederación Española de la Policía (CEP) consideran que este movimiento no es sino la prueba de "cuánto le cuesta a Interior hacer un esfuerzo real, potente y definitivo para proteger a los policías". Y es que, si los plazos se cumplen, los agentes de la Unidad de Intervención Policial (UIP) y de la Unidad de Prevención y Reacción (UPR)"no tendrían su chaleco integral hasta dentro de dos años".

Hay que destacar que la cantidad licitada es insuficiente y que el objetivo de aunar en un chaleco "tantas funciones" obedece también a la búsqueda de abaratar costes por parte del ministerio que dirige Fernando Grande-Marlaska. Sin embargo, no hay que pasar por alto otro detalle importante que figura en esa Memoria de la Dirección General de la Policía, que hace referencia al "cumplimiento en la prevención de riesgos laborales".

Táser y cámaras personales de grabación

Esta nueva estrategia de Interior tiene reflejo, no sólo en este contrato de "chalecos integrales de orden público", sino en otras compras de material como táser y cámaras personales de grabación. Según explican desde la CEP, en la actualidad la Policía Nacional cuenta con 1.600 inmovilizadores eléctricos, una cifra irrisoria si tenemos en cuenta que hay 72.000 agentes en el Cuerpo. Pues bien, desde la DGP anunciaron la compra de otras 3.500 pistolas táser, cantidad que sigue siendo insuficiente y que además no será de entrega inmediata. La compra es en cuatro años, por lo que los agentes recibirán 700 cada año.

Y lo mismo ocurre con la falta de cámaras de grabación personal, 4.000 en la actualidad. La Dirección General de la Policía anunció la adquisición de 7.000 nuevos dispositivos, entre 2025 y 2028. Un gasto de 10,38 millones, que no cubrirá las necesidades de los agentes. "La cifra sigue siendo insuficiente para garantizar la seguridad jurídica de los policías en muchas intervenciones en las que sería vital poder registrar lo que ocurre", insisten desde este sindicato.