Marlaska cuela una reforma en el decreto de ayudas por la DANA para mantener en su cargo al jefe de la Policía Nacional

Por la puerta de atrás y con alevosía. Así ha actuado el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, que no ha dudado en utilizar el Real Decreto de ayudas por la DANA para evitar la jubilación forzosa del comisario José Angel González, un alto cargo de su confianza dentro de la Policía Nacional. En concreto, el Ejecutivo ha incluido la modificación de la ley orgánica que afecta a la jubilación de los agentes a los 65 años y la ha "retorcido" para que "la persona titular de la Dirección Adjunta Operativa de la Policía Nacional (DAO) pueda permanecer en la situación de servicio activo mientras ostente dicho cargo". O lo que es lo mismo, hasta que Marlaska decida su cese.

La disposición final quinta, publicada este martes en el Boletín Oficial del Estado (BOE), modifica el artículo 5.2 de la Ley Orgánica 9/2015 del Régimen de Personal de la Policía Nacional, con el objetivo de retrasar la jubilación de uno de los hombres de confianza del ministro, José Ángel González, al igual que hizo en el pasado con el DAO de la Guardia Civil.

Sobra decir que, pese a sus intentos por colar este cambio por la puerta de atrás, finalmente ha salido a la luz. "Víctimas a cambio de mantener su brazo político dentro de la Policía. La última indignidad de Marlaska", denunciaba la portavoz de Interior del PP, Ana Vázquez, una de las primeras en darse cuenta de esta artimaña. Y se preguntaba por qué habiendo 77.000 policías y 170 comisarios principales, "solo les sirve ese".

"Emergencia nacional" por un alto cargo

La justificación de esta medida, por parte del Ejecutivo, se encuentra recogida también en el texto del segundo real decreto de ayudas por la DANA: "En esta situación de emergencia nacional resultaría altamente disfuncional proceder a la sustitución de quien, al frente de la Dirección Adjunta Operativa, se encuentra dirigiendo y coordinando sobre el terreno las funciones operativas de los efectivos de la Policía Nacional". El documento también especifica que "estas funciones cobran especial relevancia en una emergencia como la ocasionada por la DANA, singularmente en la Comunitat Valenciana, que ha determinado el despliegue de más de 10.000 policías nacionales y guardias civiles, con el fin de rescatar a supervivientes, garantizar la seguridad y restablecer la normalidad en las calles".

No obstante, hay que recordar que en una comparecencia en el Senado, el pasado 24 de octubre, Marlaska ya avanzó que estaban estudiando la forma de evitar la jubilación del DAO de la Policía, al que calificó de "impecable" e "indiscutible". Su objetivo, decían, era equiparar su situación con su homólogo en la Guardia Civil, tal y como recoge ahora el BOE.

"Jubilación premium" para un único policía

Desde la Confederación Española de Policía (CEP) denuncian la "vergonzosa" iniciativa impulsada por el ministerio que dirige Grande-Marlaska, por la que aprovechan una catástrofe nacional para "facilitar que el DAO" disponga de una "jubilación premium". Además, el hecho de que el jefe operativo de la Policía Nacional sea "el primer y único miembro del Cuerpo al que se le permita disfrutar de este privilegio singular y exclusivo, ha generado un amplísimo rechazo entre miembros de todas las escalas", denuncian.

Desde este sindicato señalan que después de meses intentando utilizar otras normas para sacar adelante esta reforma, como la Ley de Presupuestos Generales del Estado o la Ley de Movilidad Sostenible -en la que el PSOE intentó colar una enmienda justificando esta medida-, el Gobierno, ha recurrido a una herramienta normativa "vinculada a paliar los efectos de un drama nacional por el que todavía seguimos de luto los españoles", en lo que sólo puede ser concebido como una iniciativa censurable y rechazable".

Así, insisten en la "absoluta falta de tacto que ha exhibido Interior en cuanto a la forma de impulsar este proyecto". Lo más grave, a su juicio, es que se condena a los 1.336 compañeros que se están jubilando durante este año a verse discriminados respecto a las condiciones en las que dejarán de prestar servicio activo. "Esa discriminación, ese doble rasero, afecta al ámbito económico, precisamente cuando todos los policías nacionales estamos reclamando una jubilación digna y tener la consideración de profesión de riesgo", apuntan, por lo que consideran que el cambio de la legislación vigente hecho público hoy no es más que otra "provocación" a todos los agentes.

Finalmente, consideran que justificar este cambio por equipararlo a lo que ya ocurre en Guardia Civil desde 2014 constituye un ejercicio de provocación corporativa, puesto que "un error no puede justificarse con otro previo".

Descontento en la cúpula policial

También han reaccionado los agentes de la Policía Nacional, a quienes les "sorprenden los esfuerzos y la búsqueda hasta la saciedad que ha mantenido este Gobierno de las fórmulas para poder mantener en su puesto, más allá de la edad de jubilación, al Director Adjunto Operativo, mientras nos niegan las fórmulas para poder reformar la legislación vigente relacionada con la jubilación digna de todos los policías nacionales". Así lo han señalado desde el sindicato Jupol, quienes recuerdan que ya existe una legislación y que se "aplica al resto de cuerpos policiales de España, salvo para la jubilación de Policía Nacional y de Guardia Civil". Ahora, tras la última artimaña de Marlaska tienen más claro que nunca que cuando el Ejecutivo quiere, "está abierto a buscar fórmulas para modificar la legislación vigente".

A su juicio, es evidente "la falta de voluntad de este Gobierno", que solo se vuelca con su personal de confianza dejando tirados a los agentes. Y en este sentido, advierten de que esta modificación hecha por la puerta de atrás, supone un "agravio", no solo con el resto de policías, sino con la propia Junta de Gobierno de la Policía Nacional. Un hecho que, según explican desde este sindicato, "está generando bastante descontento en la cúpula policial".