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Podemos se querellará contra Aguirre tras no alcanzar un acuerdo en el acto de conciliación

Podemos presentará finalmente una querella penal contra la presidenta del PP de Madrid, Esperanza Aguirre, a raíz de las publicaciones en internet en las que la expresidenta de la Comunidad de Madrid afirmó que Podemos había recibido 3,7 millones de euros de Venezuela y estaba con ETA y con el chavismo.

La querella seguirá adelante al haber finalizado hoy sin acuerdo el acto de conciliación previo a la tramitación de la querella en el que han participado Aguirre y la secretaria de Análisis Político de Podemos, Carolina Bescansa, en el juzgado de instrucción número 97 de Madrid.

Tanto Aguirre como Bescansa han confirmado a los periodistas que aguardaban su salida del juzgado que no han alcanzado un pacto, por lo que la querella que ha dado origen al acto de conciliación seguirá su curso en el juzgado de instrucción número 97 de Madrid.

La formación liderada por Pablo Iglesias se querella con Aguirre al entender que sus declaraciones tenían la voluntad de “descalificar” a Podemos, mientras que la presidenta del PP de Madrid insiste en que sólo reprodujo verbalmente las informaciones publicadas por varios periódicos.

Este trámite previo se ha desarrollado este martes tras ser aplazado el pasado 16 de octubre por la falta de un poder notarial que permitiese al secretario de Programa de Podemos Juan Carlos Monedero, hoy sustituido por Bescansa, representar a su partido en este trámite.

La secretaria de Análisis Político de Podemos ha lamentado que Aguirre no haya aprovechado la oportunidad que le ofrecía el acto de conciliación, en el que, según ha dicho, ha intervenido con “nerviosismo”, para retractarse, “restituir la verdad” y pedir disculpas.

“Tendrá que ser la vía judicial la que diga a Aguirre que a los adversarios se les combate con ideas”, ha proseguido Bescansa, que ha reprochado a Aguirre el haber presidido “uno de los gobiernos más corruptos que se recuerdan en España” y competir por el puesto de campeona de España “de la presidencia de gobiernos corruptos” y “en adjudicación de contratos de la trama Gürtel”.

Sobre la información citada por Aguirre sobre la financiación obtenida por dirigentes de Podemos en Venezuela, Bescansa ha recalcado que Podemos se ha financiado “siempre” de forma absolutamente transparente” con donaciones de personas que han remitido “con mucho esfuerzo” pequeñas partidas.

Así mismo, ha recalcado que Podemos ha condenado “en distintos espacios” a ETA y todas las formas de terrorismo, tras lo cual ha reprochado a Aguirre que se crea con la autoridad suficiente para decir al resto de actores políticos qué tienen que decir y cuándo”.

La dirigente de Podemos se ha referido así a las declaraciones de la presidenta del PP de Madrid antes del acto, en la que Aguirre sostenía que conciliar con ella era “muy fácil” y que consideraría suficiente que Podemos dijese que está contra el chavismo, el castrismo y ETA.

Por su parte, Aguirre ha reiterado en el acto de conciliación -como declaró antes de entrar en el juzgado y a su salida- que en las afirmaciones que motivaron la querella se limitó a referir noticias no desmentidas ni rectificadas publicadas en las portadas de dos periódicos y bajo el amparo de la libertad de expresión.

La presidenta del PP de Madrid ha sostenido que la querella de Podemos es una utilización torticera de los tribunales “para acallar al discrepante” bajo la amenaza de reclamarle 100.000 euros.

Y ha expuesto que, a diferencia de lo que ocurre con ella, Podemos no ha presentado querella contra los medios de comunicación que ella citó en sus afirmaciones o contra la líder de UPyD, Rosa Díez, que también acusó a Podemos, según ha dicho, de apoyar a ETA.

Esta circunstancia ocurre, según Aguirre, porque Podemos no quiere que los medios de comunicación critiquen al partido ni que se recuerde el día en que sus actuales dirigentes impidieron “con violencia” que la portavoz de UPyD en el Congreso hablase en la Universidad Complutense.

Aguirre ha reprochado a Podemos que quiera eludir el debate ideológico y utilizar los juzgados para “amedrentar”, “acallar” y “apabullar” al adversario político.