Los Reyes, marca España, en el funeral de Francisco

Los Reyes han vuelto a ser la voz de España en el exterior. La máxima representación española en el funeral del Papa Francisco ante una más que llamativa ausencia por parte del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que, sin agenda pública que argumentar,ha sido uno de los pocos jefes de gobierno ausentes ante el "cónclave" de líderes mundiales que sí acudieron a darle su último adiós al Sumo Pontífice.

Frente a este hecho, destaca el caluroso recibimiento que han tenido los Reyes de España por parte de la mayoría de líderes mundiales. Estrecharon la mano al presidente francés, Emmanuel Macron y al heredero de Abu Dhabi y muy destacado fue el saludo en la misa de exequias entre el presidente de Estados Unidos, Donald Trump y el Rey Felipe VI. Un gesto que ha repetido después la Reina Letizia. La delegación española se situó entre Ecuador y Estonia. Tal y como marcaba el protocolo, las delegaciones se sentaban por orden alfabético en francés. Detrás de los Reyes, se sentaron las vicepresidentas María Jesús Montero y Yolanda Díaz y, en unas filas más atrás, el ministro de Presidencia, Félix Bolaños, junto al líder de la oposición, Alberto Núñez Feijóo. España es la única Monarquía a la que su jefe de Gobierno ha dejado sola en el funeral. Pues el primer ministro del Reino Unido, Keir Starmer, ha viajado junto al príncipe Guillermo y Alexander de Croo junto a los reyes de Bélgica.

La relación entre los Reyes y el Papa

Los Reyes Felipe y Letizia llegaron a Roma a última hora del viernes, entre importantes medidas de seguridad, con el objetivo de poder despedirse del Papa Francisco antes de que tuviera lugar el funeral. Alojados en la embajada española ante la Santa Sede, se desplazaron a primera hora de la mañana a la Basílica de Santa María para concentrarse frente al féretro del Papa Francisco. En una visita privada, los Reyes pudieron dar el último adiós a un papa con el que la Monarquía española ha conectado desde el primer momento. Tras presentar sus respetos, el Rey Felipe y la Reina Letizia pusieron rumbo a la céntrica plaza de San Pedro para acudir al funeral.

Hasta en dos ocasiones, los Reyes de España, pudieron reunirse con el Papa Francisco. La primera, cuando todavía eran príncipes, y la segunda ya como Reyes. Precisamente, tan solo 16 días después desde la proclamación de Felipe VI, los Reyes realizaron su primer viaje internacional con destino al Vaticano, donde tuvieron su segunda audiencia con el Papa. Francisco acogió a los Reyes con enorme cariño. Unos gestos recíprocos.

Tal y cómo se recuerda, la visita estuvo marcada por el “buen humor y un clima familiar desde el primer momento”. La duración del encuentro también daba cuenta de ello. Hasta 40 minutos frente a los 25 que solía dedicar el Papa a los jefes de Estado. Entonces, los Reyes regalaron al Papa un libro. Un facsímil del “Oráculo manual y arte de la prudencia”, obra del jesuita aragonés Baltasar Gracián y del que solo existían dos ejemplares en el mundo. Por su parte, el Santo Padre, les obsequió con un medallón de bronce que reproduce el diseño inicial de la basílica de San Pedro. Entonces, el jefe del Estado se despidió ante el Sumo Pontífice con “la esperanza de verlo en España”. Un viaje que, pese a las intenciones, se quedó pendiente en la agenda internacional del Papa.

En los últimos días, la Casa Real ha querido ensalzar el “compromiso con los más pobres” por parte del Papa, su “coherencia vital e intelectual” o su “aspiración constante a un mundo más justo y mejor”.