Política

Crisis en el PSC

Rocío Martínez-Sampere y Laia Bonet dejan la ejecutiva del PSC

La diputada crítica del PSC Rocío Martínez-Sampere ha anunciado su dimisión de la dirección del PSC, aunque ha acatado, pese a que "no la comparte", la disciplina del partido y ha votado "no"a la propuesta para solicitar la transferencia de competencias para referendos, mientras.

CiU, ERC e ICV-EUiA han aprobado hoy, con la abstención de la CUP, la propuesta de pedir el traspaso de la competencia para convocar referendos a través del artículo 150.2 de la Constitución, que contará con la oposición de PPC, Ciutadans y PSC, una posición de esta última formación que las corrientes críticas no comparten.

"He trabajado incansablemente hasta el último minuto para que el PSC pudiera tener una posición de unidad que representara toda su pluralidad y sus posiciones favorables a hacer una consulta, algo que no ha sido posible", ha explicado Martínez-Sampere a los medios antes del inicio del pleno extraordinario en el Parlament.

Tras dejar claro que "en ningún caso"su voto "sería favorable a lo que hoy se plantea, porque es un procedimiento con el guión escrito", y que una "sola abstención no es relevante en términos de que Cataluña consiga sus anhelos legítimos", ha apuntado que considera "más responsable estar con lo que ha decidido la democracia interna del partido, aunque no comparta su decisión".

"Si creyera hoy que mi sola abstención haría que el país consiguiera poder ejercer el derecho a decidir, o fuera una votación de principios, y no de procedimientos, sobre si estamos o no a favor de este derecho, estas consideraciones hubieran pasado por encima de otras", ha recordado.

Por ello, a pesar de evidenciar su "compromiso para trabajar por un PSC fuerte y plural desde dentro", la parlamentaria, en cuyo horizonte está presentarse a las primarias del partido a la alcaldía de Barcelona, ha anunciado que ha presentado su "renuncia"a la comisión ejecutiva del partido, de la que forma parte.

"El PSC es un partido imprescindible para Cataluña, pero como también necesita cambios profundos en la manera que tiene de gestionar su complejidad, su pluralidad y la manera de ejercer sus liderazgos, me comprometo a impulsar estos cambios dentro del PSC, que en estos momentos son incompatibles, porque se tienen que hacer desde abajo y desde dentro, con seguir formando parte de la dirección, a la que acabo de presentar mi renuncia", ha detallado.

Tras la renuncia también ayer a su escaño de otro diputado crítico del PSC, el alcalde de Lleida, Àngel Ros, el foco se centra ahora en la decisión final de otros tres diputados díscolos -Marina Geli, Joan Ignasi Elena y Núria Ventura-, que se plantean votar a favor de la propuesta, en contra de la decisión del partido.

Martínez-Sampere ha expresado "su respeto, consideración y apoyo a los otros compañeros que creen que hay que votar hoy otra cosa, que representan también a mucha gente dentro del PSC, y, en este sentido, creo que son del partido y lo tienen que seguir siendo", ha sugerido sobre su posible expulsión en ese caso.

La diputada, en cuya decisión "han pesado muchas cosas contradictorias", ha lamentado la "presión desproporcionada sobre el PSC"en los últimos días y ha reclamado la "reforma urgente de la ley electoral, sin la que no podremos tener una mejor democracia".

Laia Bonet también deja la ejecutiva

Por su parte, la exdiputada del PSC Laia Bonet, que optará a las primarias socialistas a la alcaldía de Barcelona, ha anunciado también su dimisión de la ejecutiva del partido y su rechazo a ocupar un escaño en el Parlament si se decide expulsar a los diputados que rompan la disciplina de voto.

"Lamento que, entre mantener la unidad del grupo parlamentario socialista en el Parlament o la del grupo socialista en el Congreso, se haya optado por la segunda. Coherente con este posicionamiento, he decidido renunciar a seguir formando parte de la comisión ejecutiva del PSC", ha anunciado Bonet en un escrito en su blog.

Bonet, que ejerce de secretaria de Función Pública y Seguridad en la ejecutiva socialista, ha recalcado su "posición inequívoca a favor de promover el derecho a decidir de los catalanes, y hacerlo a través de una fórmula acordada con el Estado".

"Hay que dar apoyo a todas las iniciativas parlamentarias que permitan explicar y escuchar argumentos y propuestas políticas, y obligar al presidente Mariano Rajoy a argumentar su negativa. La iniciativa de hoy iba en esta dirección", ha opinado Bonet.

Al mismo tiempo, ha insistido también en que la abstención hoy permitía "respetar los mandatos internos que la mayoría del PSC había marcado últimamente, respetar nuestro programa electoral y permitir una síntesis política de la pluralidad del PSC".

Ante la posibilidad de que tres diputados rompan hoy la disciplina de voto, Bonet ha calificado de "muy graves y negativas"las "amenazas de expulsión a aquellos compañeros que han expresado sus dudas o posicionamientos contrarios".

"Si como consecuencia de las reacciones políticas que se puedan producir en el seno de mi partido tras la votación, hay expulsiones de compañeros que hoy voten distinto, y eso hiciera que tuviera la oportunidad de entrar en el Parlament, quiero anunciar, desde ahora mismo, que no ocuparé el escaño en estas condiciones", ha dicho.

En todo caso, se ha reafirmado en su intención de presentarse a las primarias a Barcelona para "cambiar al PSC"y ha anunciado "una ronda de consultas con otros precandidatos para valorar el impacto de la nueva situación en el proceso de primarias abiertas".