¡Visitamos el food truck de Dabiz Muñoz!

Cuenta Dabiz Muñoz que durante el confinamiento se dio cuenta de que lo que en esta vida quería hacer era cocinar y cocinar: “No importa el qué ni el dónde”, confirmó. A pesar de la falta del comensal foráneo que todos ansiamos comenzar a recibir, para que este Madrid, tan vivo gastronómicamente hablando al que estamos acostumbrados se reactive, el cocinero reabrió DiverXO hace unas semanas con todas las medidas de seguridad. Alta cocina radical en el único estrella Michelin. Durante la cuarentena también y una vez recuperado de la enfermedad, aunque aún arrastra secuelas leves, también comenzó a hornear El GoXO, el concepto de “delivery”, que Glovo también reparte en Barcelona, diseñado sin renunciar a su filosofía de cocina: “Soy hiperactivo a nivel físico y mental y tenía la necesidad económica de hacer algo”, confiesa. Por eso, Comencé a hacer recetas en casa con Cristina y después a contárselas a los miembros de mi equipo por videollamada”, nos explicó hace unos días durante un debate organizado por la Guía Michelin. El caso es que para afrontar la crisis económica, provocada por el Covid-19, el cocinero ideó un nuevo concepto de negocio en el que las reglas a nivel creativo son exactamente las mismas que las de StreetXO y DiverXO, pero la forma de afrontarlo es completamente opuesta. ¿El resultado? Platazos de alta cocina frescos y chispeantes hechos en el momento: “No es diferente el nivel de exigencia en ninguno de los conceptos XO. No admitimos fallos”, advierte.

Contamos esto, porque Dabiz sigue expandiendo su “goxismo ilustrado”. Sí. Nos tenía en vilo desde hacía unas semanas cuando durante el lanzamiento del “delivery” en la Ciudad Condal anunció que en diciembre tendría listo un nuevo restaurante en algún lugar de Madrid. “La fiesta del goxismo ilustrado en el foodtruck GoXO va a ser total”, anunció en su Instagram. Nunca le ha interesado “vender por vender”, pero sí ahora ofrecer bocados diferentes a los que sirve en StreetXO y en DiverXO: “Si no llevo a cabo conceptos de este tipo, resultaría inviable seguir adelante con DiverXO”, sentencia. Y lo cierto es que el cocinero ha democratizado su cocina gracias a bocados divertidos, plenos de sabor y chispeantes y la respuesta ha sido inmediata, porque, a pesar del frío, hay que ponerse a la fila para pedir.

¿Qué pedir? Los dumplings bolognesa (12 euros) a la plancha rellenos de vegetales al wok con boloñesa china de vaca vieja y chorizo ahumado de León con cinco especias chinas, shitakes encurtidos, espuma de parmesano y jugo de mostaza-miel. O el perrito Mumbai (12 euros). Con una estética estudiada y hecho al momento, está formado por un brioche de mantequilla tostada, la salchicha Frankfurt ahumada a la brasa, “Butter Masala” de tomates rama muy maduros, alioli “Vindaloo”, menta escabechada, chutney cítrico y el pani puri de coco. O el Japo Coreano (12 eruos), con pan de brioche tostado en mantequilla con salchicha Frankfurt ahumada también con ketchup de kimchi casero, mayonesa de yuzu y trufas negras, yema de huevo cremosa y migas de tempura. De beber, un cóctel, como el margarita thai de mezcal con jalapeños, lemongrass, limones verdes, lima kefir, triple seco y mezcal añejo. Y, de postre, la tarta de la Pedroche (10 euros), por supuesto, preparada con quesos frescos y parmesano, galletas con mantequilla tostada y pimienta de Sichuan.