La Mentira, verdadera diversión

Detrás de este espacio con llenos diarios se encuentran Borja Anabitarte y Lara Alonso del Cid, propietarios del Grupo El Mentidero, formado por cuatro establecimientos, de los que solo se mantienen cerrados El Mentidero de la Villa, al encontrarse en plena remodelación, y La Sal del Mentidero, cuya reapertura está prevista para abril con la barca de espetos que la caracteriza recibiendo al comensal. Dicho esto, nos centramos en esta nueva incorporación, un establecimiento canalla y divertido donde los haya en el que realmente te olvidas por un par de horas de la oscura realidad que deja la pandemia. De ahí que los ideólogos del concepto hayan dado en el clavo. Un apunte hoy, día de San Valentín, un dj y un saxofonista tecno pondrán ritmo a la merienda cena. Después de traspasar unas cortinas de terciopelo y bajar las escaleras, llama la atención la decoración, firmada por Chesu Puente, llevada a cabo por el equipo Project Work de Pedro Temprano e inspirada en los años 20. Cierto es que al local no le falta detalle alguno de lo que buscan numerosos comensales, que acuden a los restaurantes a socializar, ahora que el Covid nos obliga a estar más en casa.

De México a Asia

Bocados para comer con las manos, un servicio atento, música unos días y espectáculo de magia otros, y un ambiente desenfadado son los ingredientes necesarios para que en pocos meses se haya convertido en uno de los restaurantes de moda. Por eso, y a pesar de tener horario ininterrumpido, de siete a nueve es necesario reservar mesa e, incluso, alguno de los reservados. En cuanto a la carta, es breve, pero con los platillos justos como para montar en la mesa un festín y dar la vuelta al mundo en un almuerzo con parada en México, Perú, Marruecos y Asia. Abrimos boca con el guacamole picantón con sus totopos, que voló de la mesa, así que enseguida la ocupó el ceviche de lubina refrescante para comer sobre una tostada de maíz y crema de aguacate y unas sabrosas gyozas de pato cubiertas con reducción de cocido madrileño. Gustaron las carrilleras de cerdo ibérico al curry verde con cilantro, hierbabuena y albahaca, que armonizamos con un Demuerte, tinto de la bodega Winnery On, tanto como los baos (de chipirones con mayonesa vittelo y de langostinos en tempura con mayonesa de kimchi) y el milhojas con el que culminamos un almuerzo con mucho rollo del bueno.

Dónde: C/ Zurbano, 17. Madrid.

Tel.: 913 08 12 85

Precio medio: 30 euros.

www.lamentiramadrid.com