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El polígrafo: ¿Es por conveniencia la boda de Juana Gil y Andrés Pajares?
¿Es por conveniencia la boda de Juana Gil y Andrés Pajares?: Falso
No, lo habrá hecho enamorada de sus hechuras o gracietas, que comicidad no le falta a Pajares, aunque ahora no la practique profesionalmente. El cómico posee un importante patrimonio producto de muchos años en la brecha –cine, televisión, teatro, lo que le echaran– que es posible que haya influido en el casamiento, aunque el patrimonio ya no sea tan rico teniendo en cuenta lo que se llevó su ex mujer, Chonchi, en el reparto de los bienes gananciales. Los recién casados lo han hecho en separación de bienes.
¿Logrará Rocío Flores reconciliar a su madre con Antonio David?: FALSO
Parece difícil. Ya se sabe que nada hay menos reconciliable que el rencor y los malos recuerdos de un tiempo más feliz. No apuesto ya porque vuelvan a sentir amor el uno por el otro. Vamos, que ni siquiera creo que puedan llegar a darse algún día los buenos días. El horno de ninguno de ellos está para bollos tras enfrentarse judicialmente un día sí y otro también, por muy buena que sea la voluntad de su hija en intentar ver reconciliados a sus progenitores.
¿Acudirá a los platós el hijo de Bigote Arrocet para arremeter contra él?: Verdadero
Sin duda alguna. El mozo promete y Bigote lo tiene merecido no solo por su afrenta a María Teresa –algo que me duele como propio, soy así de sentido–, sino por sus vacilaciones en si es o no su padre legítimo. Alexis irá a por todas y el cómico deberá indemnizarlo económicamente aunque sea tarde para compensarlo por la falta de amor, cariño, atención y despreocupación paterna durante tantos años. Teresa no podía esperar más, Alexis ya lo había imaginado.
¿Es sincero Elías Sacal al afirmar que no le fue infiel a Mar Flores?: Verdadero
Puede decir misa y jurar su amor por ella en las redes, pero son muchos los que sostienen que hubo engaño, traición o infidelidad por parte del empresario mexicano. A estas alturas y con 50 años muy baqueteados, Mar Flores –que antaño fue «la más» y aún se conserva–, debería haber aprendido la lección. Fernández Tapias debe de estar riendo, si se acuerda, de cuando le hizo tanto daño, cuando la modelo se dejaba guiar por su cuñado Kiko Matamoros.
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