Salvador Illa será el nuevo rey mago catalán… o el caganer

Por estas fechas aparece siempre Nostradamus como un fantasma inextricable pero con mucho predicamento. Los hermeneutas que lo traducen nos cuentan que este año será de zombis, hambrunas, guerras y meteoritos, o sea, que mejor pasamos del 21 y nos vamos directamente al 22 o, sencillamente, nos vamos, le grito al televisor. Pero nada intuyó el boticario francés sobre el espectacular triunfo de Salvador Illa en el programa «Maks Singer, adivina quién canta». Después de este éxito, Pedro Sánchez, el gran creador de nuevas estrellas, lo ha convertido en candidato a la presidencia de la Generalidad, superando a Miquel Iceta, ganador de «Mira quién baila». Nadie supo que debajo del disfraz de Caballero de la Triste Figura se encontraba Illa, que interpretó de tal guisa la bonita copla «Ay, pena, penita, pena». Fastuoso. Recibió el premio en medio de los sollozos del jurado y de todos los presentes. Hay que destacar que con el lanzamiento al estrellato de Illa, qué maravilla, Sánchez se consagra como el gran promotor de nuevas figuras de la política, situándose a la altura de maestros como Iván Redondo, Miguel Ángel Rodríguez y José Felix Tezanos, por ejemplo. Su magistral táctica ha sido reconocida internacionalmente: sitúa a sus elegidos en los mejores espacios de la tele para que se hagan un nombre y una cara, sobre todo una cara, y luego los manda a disputar las grandes carreras electorales. Y ahí va Illa, qué maravilla, con la mochila repleta de regalos para los indepes cual Rey Mago que ha de lograr el tripartito... o será el caganer. En esta ocasión y para el Gran Premio de la Generalidad, el promotor ha preferido a Rocinante que a Rucio, el asno de Iceta. Es una metáfora, claro. Dicen las buenas lenguas pronosticadoras que Miquel se perfila como favorito al Gran Premio del Consejo de Ministros: conseguiría la cartera de Política Territorial. Aunque también cuentan que el avispado mánager SuperSánchez estaría pensando en crear para él un nuevo ministerio, resucitando aquellos populares «Coros y Danzas» que en 1939 fundara Pilar Primo de Rivera dentro de la Sección Femenina. Y se rumorea que ahora proyecta convertir a Fernando Simón, que va como una moto, en tertuliano estrella de «Sálvame», primer paso hacia su candidatura a la alcaldía de Madrid. O así.