Naty Abascal, sensualidad a los 80

Natividad Abascal Romero-Toro es el nombre que figura en su carné de identidad. Ese es el real y el que aparece en Wikipedia si se quiere saber algo «oficial» de la que sigue siendo la mejor estilista y experta en moda de España. Fue gran amiga de Oscar de la Renta, de Versace y lo sigue siendo de Valentino. El modisto italiano es para ella parte de su familia y con el que comparte vacaciones. Hace unos días sorprendió con una imagen rompedora en el cumpleaños del periodista y director de Vogue Arabia, Manuel Arnaut. Lucía un vestido transparente que dejaba a la vista su lencería. A sus 80 años puede presumir de un físico espectacular. Ella misma contaba que se encontraba en un buen momento profesional. «Estoy con mucho trabajo, muy centrada en la familia y aprovechando las oportunidades que da la vida». Su nubarrón en estos tiempos son las complicaciones legales de su hijo menor al que, como es natural, apoya y protege.

La que fuera duquesa de Feria es uno de esos personajes que no necesita apellido. Cuando se habla de Naty ya se sabe a qué personaje del mundo social nos referimos. Fue la primera española que fichó por la agencia de modelos más importante de Estados Unidos y que creó Eileen Ford. La misma que catapultó a tops como Naomi Campbell, Elle Macpherson, Kim Bassinger o Crhisty Turlington.

Antes que a ellas, Eileen había fichado a Nati que aún no había cambiado la «i» final de su nombre por «y». Después llegó Woody Allen, firmas como Bulgari o Cartier, los grandes modistos... Si hubiera querido tenía todas las papeletas para haber llegado a lo más alto del escalafón mundial tanto en las pasarelas como imagen de grandes firmas, pero eligió otro camino. Regresó a España después de una experiencia matrimonial efímera, pero que le sirvió para cerrar su etapa en Nueva York. Se instaló en Sevilla donde la esperaba una familia numerosa de once hermanos y unos padres con una mente mucho más abierta de lo que era habitual en los años 70 con respecto al desarrollo personal y profesional de las hijas.

La madre Natividad ya había roto ciertos prejuicios. A pesar de provenir de una familia acomodada donde las mujeres se quedaban en casa: la jefa del clan Abascal montó una de las primeras tiendas de moda de Sevilla. Naty se volvió a casar. Esta vez con un aristócrata Rafael Medina. La nueva duquesa de Feria le dio brillo a una familia cuya suegra, Victoria Eugenia Fernández de Córdoba, no le facilitó la vida. Sus íntimos la definen como «valiente y fuerte que ha tenido que hacer frente a situaciones afectivas complicadas y siempre sale adelante».A sus 80 años, sigue construyendo su vida volcada en lo que más quiere: sus hijos y sus nietos.