Génova

El PP se prepara para batirse con Rubalcaba en la precampaña

El PP prepara su artillería electoral con la idea de que el alter ego de Mariano Rajoy puede acabar siendo el vicepresidente primero y ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba. Ya no se trata de deseos en las filas socialistas y de especulaciones mediáticas, ya que la hipótesis va cogiendo tanta fuerza en los círculos políticos que en la dirección popular dan cada día más por hecho que José Luis Rodríguez Zapatero no se presentará a las elecciones generales y que el candidato socialista será Rubalcaba.

Rajoy y la plana mayor del PP barruntan que Zapatero tirará la toalla antes de los comicios del próximo mes de mayo
Rajoy y la plana mayor del PP barruntan que Zapatero tirará la toalla antes de los comicios del próximo mes de mayolarazon

Tan convencidos están de esta hipótesis que ya forma parte de su estrategia electoral y, en consecuencia, influye en el discurso y en las iniciativas y actuaciones políticas y parlamentarias. De hecho, en el PP incluso se barruntan que Rodríguez Zapatero podría anunciar varios meses antes de las elecciones autonómicas y municipales de mayo su decisión de no repetir. Sería a modo de baza electoral para intentar paliar el batacazo descomunal que todas las encuestas anticipan que va a darse el PSOE en esos comicios. En el PP, por ejemplo, creen que el resultado puede llegar a ser histórico a su favor, similar al que se dio en las elecciones autonómicas y municipales del 83, entonces a favor del PSOE, que acababa de conseguir en el 82 su primera mayoría absoluta.

«Cualquier otro candidato que se presente será para nosotros peor que Zapatero», aseguran fuentes de la dirección popular sobre las quinielas que sitúan en la línea de salida otros nombres, además del de Rubalcaba, como el de la ministra de Defensa, Carme Chacón.

Ahora bien, las mismas fuentes reconocen que Rubalcaba es el peor hueso de roer, aunque tampoco le ven capaz de arrebatarles la victoria que todos los sondeos insisten en otorgarles.

«Es el mejor candidato para el PSOE para contener la caída, pero las cosas están tan mal, y el desgaste que les ha dejado la mala gestión de la crisis es tan grande, que ni siquiera él tiene fácil darle la vuelta a la tortilla», sentencian en Génova.

Para el caso de que Zapatero dé la sorpresa antes de las elecciones autonómicas y municipales el PP tiene ya preparada su contestación preventiva. Rubalcaba ha pasado a estar tanto o más que Zapatero en el centro de su diana, y en la arena parlamentaria es donde posiblemente se dejará ver con más evidencia la estrategia de acoso y derribo. Para ello aprovecharán las debilidades y puntos flacos que se derivan de su rol de escudo de Zapatero, de su omnipresencia en todas las áreas y de su control de un área tan espinosa como Interior. La consigna es clara: «No le vamos a pasar ni una, y no dejaremos de recordarle las cuentas pendientes del pasado».