El PP alerta de que Mas pone en peligro el corredor mediterráneo

BARCELONA- Consciente de que Artur Mas ha planteado el 25 de noviembre como un plebiscito electoral sobre la independencia, la presidenta del PP catalán, Alicia Sánchez-Camacho está decidida a alertar cada día sobre los riesgos de la independencia y, en especial, sobre uno de los que considera más graves: la salida de Cataluña de la Unión Europea. La dirigente popular, ayer en Tarragona, advirtió sobre una de las consecuencias de la expulsión de la UE: «El proyecto del corredor mediterráneo, en el que Tarragona juega un papel capital, quedará bloqueado por el objetivo de CiU de poner fronteras».

Cataluña ha apostado muy fuerte por el corredor mediterráneo –una red ferroviaria que debe unir Algeciras con la frontera francesa– porque supone una oportunidad única para convertirse en una plataforma logística del sur de Europa. También el Gobierno ha secundado esta apuesta, tal y como demuestran los presupuestos de 2013, que destinan un total de 1.019 millones para su desarrollo (el 41 por ciento de los cuales se invertirán en Cataluña).

El corredor debe comunicar, por tanto, Andalucía, la Comunidad Valenciana, Aragón y la frontera francesa. Todo ello, según Sánchez-Camacho, corre ahora riesgo de bloqueo por culpa del proyecto separatista de Mas. «La hoja de ruta convergente quiere convertir a nuestros hermanos valencianos y aragoneses en extranjeros, pero nueve siglos de historia compartida no se pueden romper por la apuesta por la división de Mas», afirmó la presidenta del PP catalán.

 Sánchez-Camacho aprovechó este ejemplo para arremeter contra el rumbo independentista establecida por CiU que, en su opinión, sólo busca ocultar su incompetencia gubernamental. «Mas ha dimitido y se ha envuelto en la "estelada"para tapar su mala gestión al frente del Govern. Pero los datos reales son que desde que Mas es presidente, cada día 300 personas se quedan en el paro», sentenció.

Dicho esto, la candidata popular a las elecciones explicitó que su intención en esta precampaña es atraer a los electores de CiU y PSC que rechazan «la aventura» soberanista de Mas y que se identifican con la moderación. «Somos la alternativa del sentido común», proclamó. En Tarragona, el PP obtuvo 3 diputados en las autonómicas de 2010; el PSC logró 4 y CiU 9. Los sondeos prevén una caída socialista.