Londres

La Policía cree que la millonaria llevaba una semana muerta

La Policía que investiga el caso de Eva Rausing, una de las mujeres más ricas del Reino Unido, no descarta la posibilidad de que la millonaria llevase una semana muerta antes de que su cadáver fuese hallado en su casa de Londres.

Según informan hoy los medios británicos, los detectives investigan si su marido, Hans Kristian Rausing, de 49 años, vivió con su mujer muerta en su mansión de Belgravia, uno de los barrios más lujosos de Londres, durante cinco días.


Eva Rausing, de nacionalidad estadounidense y con antecedentes de adicción a las drogas, fue hallada muerta por la Policía el pasado lunes y su esposo detenido también ese día. Tras su detención, Hans Kristian Rausing fue ingresado en un centro sanitario de Londres para recibir atención médica, si bien la Policía no ha aportado detalles de su estado.


No obstante, el diario "The Guardian"señala hoy que Hans Kristian Rausing está ingresado en el hospital Maudsley de Londres por problemas relacionados con los estupefacientes. El caso de Eva Rausing ha conmocionado al Reino Unido dado que pertenece a la familia del imperio Tetra Pak, considerada una de las más ricas del Reino Unido.


El cadáver fue encontrado cuando la policía practicaba un registro, por un caso de drogas, en el domicilio donde la pareja vivía con sus cuatro hijos. La fortuna de la pareja se estima en unos 5.400 millones de libras (7.000 millones de euros) gracias al imperio Tetra Pak, fundado por el padre de Hans Rausing y dedicado a la fabricación de envases de cartón como el tetrabrick.


Las fuerzas del orden han indicado que el Comando de Homicidio y Delitos Serios está investigando las causas de la muerte de Eva Rausing. El matrimonio Rausing fue imputado en 2008 por tener en su casa importantes cantidades de droga, como crack, heroína y cocaína.
Incluso el pasado mes de abril, Eva Rausing fue arrestada al tratar de entrar en la embajada de EE. UU en Londres con pequeñas cantidades de drogas. Eva Rausing era hija de un alto ejecutivo de Pepsi, que posee una isla privada en Baja California, y tenía con su marido una mansión en las islas Barbados valorada en 15 millones de libras (casi 18 millones de euros).