Hollywood

Gas pimienta para conseguir las mejores rebajas

Una compradora "compulsiva"armada con un spray de gas de pimienta ha sembrado el caos en un centro de la cadena Wall-Mart en Porter Ranch, en el sur de California, al atacar con este 'arma' a varios clientes que se afanaban por comprar algunos de los productos tecnológicos rebajados con motivo del denominado 'viernes negro', ha informado el diario 'Los Angeles Times'.

Matthew Lopez, uno de los clientes que ha sufrido los efectos del gas pimienta, ha explicado que los hechos se produjeron este jueves por la noche cuando el centro abrió sus puertas para la jornada de rebajas y todo comenzó en la zona de venta de videojuegos. "Escuché gritos y chillidos. Momentos después, me empezó a arder la garganta. Estaba tosiendo mucho", ha indicado.

Lopez ha relatado que los hechos tuvieron lugar a las 22.00 horas, cuando un pitido marcó el inicio de la jornada del 'viernes negro', caracterizada por los grandes descuentos en todo tipo de productos. Este cliente ha explicado que, cuando llegó a la zona de videojuegos, el escaparate se había venido abajo y los empleados de Wall-Mart intentaban contener a los compradores, que se hacían con las consolas y los videojuegos esparcidos en el suelo a pesar de su oposición. "Era una locura", ha añadido.

Otro comprador ha indicado que los gritos comenzaron cuando unas cien personas que hacían cola para adquirir consolas Xbox y Nintendo Wii empezaron a darse empujones. Alejandra Seminario, otra de las personas presentes en el centro de Wall-Mart, ha señalado que se encontraba en la fila para comprar algunos juguetes cuando, a las 21.55 horas, algunas personas comenzaron a gritar y a romper los embalajes de plástico de las videoconsolas antes de que comenzara la venta de éstas a las 22.00 horas.

"La gente empezó a gritar, empujándose unos a otros y, entonces, toda la zona se llenó de gas pimienta", ha afirmado esta vecina de la localidad de Sylmar. "Imagino que fue provocado por los gritos de las personas que comenzaron a romper los embalajes de plástico de los palets de las consolas. Comenzó con las personas empujándose y gritando porque estaban empujándose hacia las cajas", ha indicado.

Seminario ha afirmado que el gas pimienta se extendió por toda la tienda y que ella misma tuvo dificultades para respirar y comenzó a toser y a sentir picores en la cara. "No quería seguir allí. Estaba demasiado asustada. Simplemente me quedé en el pasillo de los muñecos", ha dicho.

Los empleados de Wal-Mart han tomado nota de las reclamaciones presentadas por unos ocho consumidores que han sufrido las consecuencias del gas pimienta. "Después de pagar, hemos visto a cinco personas que tenían muy mala cara", ha afirmado.

"Recibieron el spray en la cara. Parecía como si tuvieran una hinchazón realmente grave y tosían", ha relatado. Sin embargo, Naekasha Contreras, una clienta de 20 años del norte de Hollywood que llegó a medianoche al establecimiento comercial, ha asegurado que ni siquiera se ha percatado de lo ocurrido y que, aunque hubiese sufrido los efectos del gas pimienta, no habría dejado de comprar lo que buscaba. "No me importa. Todavía tengo mi televisión. Nunca había visto Wall-Mart tan alocado pero creo que podría haber sido peor", ha asegurado.