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Guerra inminente a la «piratería»

Antes del verano, las medidas «antipiratería» entrarán en vigor. Es uno de los encargos prioritarios del ministro Wert a José María Lassalle, secretario de Estado de Cultura, junto a la Ley de Mecenazgo

El ministro Wert con Lassalle, durante su toma de posesión
El ministro Wert con Lassalle, durante su toma de posesiónlarazon

Y a había aludido José Ignacio Wert, nuevo ministro de Educación, Cultura y Deporte, a la «patata caliente» que Sinde le había dejado en el Ministerio de la Plaza del Rey: el desarrollo de la Ley «Antipiratería» que el Gobierno decidió no aprobar in extremis en sus últimos días de mandato. Ayer, en la toma de posesión del secretario de Estado de Cultura, José María Lassalle, volvió a insistir, pero de manera mucho más contudente: «Nadie va a respetar la cultura de un país que lidera el ranking de descargas ilegales». Por esta misma razón, asegura que «actuaremos con decisión contra quienes se lucren indebidamente del trabajo intelectual de otros». Wert sentenció además que «muy pronto» habrá noticias al respecto. Concretamente, el nuevo gestor quiere que antes del verano entren en marcha las medidas.

¿Aprobación del reglamento?
El camino más corto para actuar con esta premura es dar luz verde al reglamento de la disposición adicional de la Ley de Economía Sostenible aprobada por el PSOE. Una opción más que probable teniendo en cuenta que, para su visto bueno, Sinde necesitó de los votos del PP, que introdujo algunas modificiaciones, defendidas por el propio Lassalle, entonces portavoz popular de Cultura en el Parlamento, como asegurar la intervención digital en el cierre de webs de enlaces y no solo la intervención de comisión administrativa que estaba prevista en el texto original. «Hacer modificaciones supondría tener que volver a pasar por el Consejo de Estado, lo que podría ralentizar la aprobación», opina un hombre fuerte del sector que está convencido de que este será el camino que emprenda el nuevo equipo para atajar el problema, pues la nueva Ley de Propiedad Intelectual prometida lleva más tiempo entre debates y ratificaciones parlamentarias.

La urgencia es una exigencia del sector, que no entendería otra prórroga más de una medida que los socialistas no quisieron adoptar, por la impopularidad que supone, ni antes de las elecciones europeas, ni después del adelanto general, previamente a las nacionales. Por eso las críticas contra Zapatero fueron furibundas después de negarse a la aprobación definitiva por el debate que se había generado en la red, según adujo Zapatero. «Hay algunas industrias que han decidido aguantar en previsión de que la normativa se aprobara, de no ser así tendrán que plantearse cerrar». Entre aquel fallido Consejo de Ministros y la toma de posesión del nuevo Gobierno, el sector cultural ha recibido como un mazazo la decisión judicial de absolver a Pablo Soto, que había sido denunciado por cuatro discográficas por la creación de programas de intercambio p2p.
«Necesitamos un aldabonazo, dar un mensaje a los "piratas"de que en España por fin se quiere hacer algo contra este desastroso fenómeno», insisten desde la industria cultural, desde la que recuerdan que las medidas acordadas hasta ahora en España, y que no han entrado en vigor por ausencia de un reglamento que las desarrolle, no van contra el internauta, como ayer afirmó el ministro Wert, que recordó que no irá contra los que «simplemente se aprovechan» de las posibilidades que crean esas redes. El objetivo de la normativa actual es retirar el contenido de las páginas de enlaces que, previo aviso administrativo, no eliminen el material protegido por derechos de autor.
La otra cuestión urgente para Lassalle es la gestación de una Ley de Mecenazgo. La misma que el PP reclamó durante toda la legislatura pasada y la propuesta estrella del programa electoral que salió vencedor el 20-N.

«La cultura de la subvención»
Wert precisó sobre esta materia ayer que es la pieza esencial para devolver el protagonismo de la sociedad con respecto a la cultura. El ministro es de los que opina que «el Estado no es el dueño de la cultura, sino el responsable de su crecimiento y de que pase a las siguientes generaciones». Con dicha medida, no se pretende «acabar con las subvenciones de la cultura, pero sí con la cultura de las subvenciones». Otro miedo que quiso despejar el nuevo responsable es la pérdida de peso del mundo cultural en el nuevo Gobierno con la adscripción del Ministerio a Educación, uno de los principales argumentos del partido socialista en estos últimos días: «Solo hay un afán de simplificar».

Lassalle se plantea llegar aún más allá del último proyecto de Ley de Mecenazgo que los populares presentaron en el Congreso. En aquella ocasión, pretendían incrementar la deducción en el IRPF de un 25 al 70% de labase en las donaciones y aportaciones del mecenazgo. Y en el caso de las personas jurídicas, que en el impuesto de sociedades se incremente la base de deducción del 35 al 60% y aumentar el límite de inversión del 10 al 20% de las personas físicas y del 10 al 20% de las personas jurídicas. Meditan además crear un Premio Nacional de Mecenazgo para aquellas corporaciones que mejor inviertan y crear el Observatorio de Mecenzago para poner en contacto a mecenas con artistas o científicos. Una buena parte del sector está a la expectativa de los resultados.

Para el secretario de Estado de Cultura, el objetivo de su mandato será «la búsqueda de sensatez, diálogo y entendimiento con todos los sectores». En su discurso de toma de posesión, afirmó que afronta su labor en el cargo con una sensación de «gran responsabilidad», según dijo, un sentimiento que es consecuencia de la importancia que tiene la cultura para nuestro país», según el que ha sido portavoz del Grupo Popular en la Comisión de Cultura del Congreso de los Diputados.

Asimismo, en su primer discurso oficial destacó la «voluntad de diálogo y entendimiento» con todas las fuerzas políticas, con especial mención al PSOE, el principal partido de la oposición, pero también a los diversos gobiernos autónomos. «Con esta voluntad de diálogo y entendimiento espero afrontar los retos y las oportunidades que tiene la cultura en nuestro país para los próximos años», afirmó al concluir el acto.

Tanto Wert como Lassalle agradecieron las «altas expectativas» con las que han sido recibidos por el sector, que se pronunció muy favorablemente a sus nombramientos. Sin ir más lejos, el presidente de la Academia de Cine, González Macho, declaró que «Lassalle es un hombre con criterio propio», lo que considera «muy importante»; mientras el director ejecutivo de la Federación del Gremio de Editores de España, Antonio María Ávila, encuentra «muy natural, y correcta» su llegada a la Casa de las Siete Chimeneas, antiguo Ministerio, ahora Secretaría de Estado. 

 

ARROPADOS
La ministra de Empleo y Seguridad Social, Fátima Báñez, los directores del Museo del Prado, Miguel Zugaza y del Reina Sofía, Manuel Borja-Villel, el presidente del Patronato del Teatro Real, Gregorio Marañón, el de los productores audiovisua-les, Pedro Pérez... fueron algunos de los asistentes a la toma de posesión de Lassalle. El ministro Wert, al ver la sala tan concurrida, lo calificó como un «chute de solidaridad en unos días tan malos», en alusión a las fechas navideñas en las que están asumiendo los nuevos cargos populares.