Educar frustrando poner límites y evitar criar tiranos

VALENCIA- Los progenitores perfectos no existen, aunque no está de más intentarlo. Libros como el de los pediatras Gonzalo Pin y Eduardo Estivill tratan de formar a los padres y madres de una generación que aparentemente lo tiene todo y no sabe apreciarlo en su justa medida.
Más allá del rigor científico, la teoría o los ejemplos prácticos, se trata de aplicar el sentido común. Y establecer límites. «Hay que aprender a decirles que no» ¿Y si se frustran? «Pues no pasa nada -argumenta Pin- es mejor que lo hagan en el entorno de la familia y prepararles para lo que les espera cuando salgan al mundo».

Deben aprender a compartir y lo que significa el esfuerzo. En la actualidad, explica el coautor de «Pediatría con sentido común para padres y madres con sentido común» (Editorial Plaza y Janés), existe una mayor exposición a nuevos estímulos, circunstancia que se agrava con una menor presencia de los tutores. «No tenemos el mismo sosiego que nuestros padres, ni disponemos del mismo tiempo para dedicarlo a nuestros hijos, lo que puede acabar por darle el dominio y control al niño. Así que nuestra principal meta debería ser el dedicarles más horas, porque a veces suplimos esa falta de atención con la compra de cosas materiales».

La obra de Pin, coordinador de la unidad de Pediatría del Hospital Quirón de Valencia, y Estivill, popular médico autor de «Duérmete niño» y el método que lleva su propio nombre, pretende ser una guía para todo tipo de progenitores, tanto los que acaban de serlo, como los que aún no lo son, y a aquellos que todos los días sufren y disfrutan educando a sus hijos, ya sean bebés o adolescentes. Porque ambos son conscientes de que los tiempos han cambiado. «Los niños de ahora no son mejores, ni peores, simplemente distintos».

¿Queda espacio para la esperanza? ¿se puede confiar en las nuevas generaciones? El doctor Pin recuerda las palabras que Sócrates pronunció hace 2.500 años: «Los jóvenes de hoy en día son unos tiranos. Contradicen a sus padres, devoran la comida, y le faltan el respeto a sus maestros».
 

Cómo curar en casa o cuándo ir al médico
- «Mi niño está enfermo, ¿qué hago?, Vamos a urgencias?, ¿Puedo usar mis medicamentos?». El libro de los pediatras trata de responder a algunas de las preguntas que más angustian a los progenitores.
- En el apartado de los problemas de salud más habituales destacan los accidentes domésticos. Al respecto, los especialistas recomiendan poner protectores en los enchufes y esquinas de los muebles, evitar las plantas de interior que puedan ser tóxicas, mantener fuera del alcance de los niños los productos de limpieza, medicamentos y objetos punzantes, o intentar tener los aparatos eléctricos desenchufados si no se están utilizando. En resumen, aplicar el sentido común.