Benditos niños y familia por Carlos PUMARES

Continúa el Festival con enorme afluencia de público. Eso es lo más importante. A concurso, la cinta francesa «Le Skylab», que escribe y protagoniza Julie Delphy, una de las actrices más importantes del cine francés. Desde los tiempos de Jean Renoir, el cine francés firma con acierto películas de aire coral, en torno a unas vacaciones o a un día en el campo, y eso es lo que ocurre en esta película: una enorme familia con niños y jovencitos se reúne en una finca de la Bretaña con motivo del cumpleaños de la abuela de la familia. Corre el año 1979 y a la NASA «se le cae» el satélite «Skylab». En esta película, amable, se sonríe, incluso puede uno reírse. Los personajes están retratados con acierto y Delphy hace interrelacionarse con mucha habilidad a los personajes mayores con los pequeños. Esta película debería estar en el palmarés final.
Otra gran ovación espontánea se produjo al término de la japonesa «Milagro», de Kore-Eda, un habitual del certamen. Esta cinta es como una ventana abierta a lo cotidiano, a la espontaneidad de los personajes y a la acertada ambientación, tanto en entornos familiares como en la ciudad presidida por una nube de ceniza volcánica omnipresente a la que nadie hace caso. A la pareja de niños separados por los problemas de sus padres se le une otro, y juntos, se dibujan los entornos infantiles. La historia parte de la inauguración de un tren bala, y la magia se forma en la creencia de que, si cuando dos trenes se cruzan se formula un deseo, se cumplirá. Todos en esta historia son buenos: niños, padres, profesores... y el juego se establece con los adultos, que recuerdan con nostalgia esos años. Kore-Eda logra atrapar un fragmento de vida y contarlo magníficamente. ¡Milagro! Martes y... ¡dos buenas películas! ¡Qué día!

Carlos Pumares