De Tinduff a Agdaym Izyk

Desde que a primeros de octubre los saharauis empezaron a desplegar sus jaimas, a unos 15 kilómetros de El Aaiún, en pleno desierto, en una protesta pacífica por las condiciones sociales y económicas a que está sometida la población por el Gobierno de Marruecos, se esperaba un incidente como el que ha tenido lugar el domingo.
Al contrario que en el pasado, los saharauis no se han situado en la frontera con Argelia (Tinduff), sino que el nuevo campamento esta prácticamente dentro del territorio que les permite el Gobierno dentro del conocido como Sáhara Occidental, en la localidad de Agdaym Izyk.
El campamento está rodeado por las fuerzas de seguridad marroquíes, pero hasta ahora permitían a los saharauis entrar y salir para abastecerse y pernoctar fuera, hasta que sin previo aviso han decidido el fin de semana establecer controles policiales aleatorios y en uno de ellos se produjo la tragedia que terminó con la muerte de un joven de 14 años.
El millar de saharauis no tienen armas y no han reivindicado la autodeterminación. Tampoco hay una presencia política del Polisario. Lo que sí han aprovechado es la presencia en el Magreb estas semanas del enviado espacial de la ONU, que ha fracasado en su intento de alcanzar un acuerdo entre Mohamed VI y el Polisario para solucionar un contencioso que dura ya 35 años, desde que España entregó a Marruecos su colonia.