Alonso avisa a los rivales

Fernando Alonso y Ferrari se han tomado el Gran Premio de Alemania como una auténtica final. Ahora o nunca. La lucha por el título se ha ido alejando poco a poco después de los sinsabores de las últimas carreras y, por eso, la carrera de este fin de semana resulta fundamental para recuperar el terreno perdido. El asturiano ha estado recluido estas dos semanas en Maranello buscando la forma de mejorar el F10 junto a sus ingenieros. El resultado parece esperanzador. Ayer marcó el mejor tiempo después de una apretada sesión libre de entrenamientos, por delante de Sebastian Vettel, al que sólo pudo aventajar en apenas 29 milésimas. El hecho que constata que el Ferrari va bien es la posición que ocupó Massa, que sorprendentemente se hizo con el tercer lugar. Signo inequívoco.El monoplaza presenta mejoras aerodinámicas y una nueva revisión del concepto aplicado en Valencia con los escapes dirigidos al nuevo difusor. Además, la lluvia promete complicar más las cosas a pilotos e ingenieros y en este escenario Alonso sabe moverse. Los Red Bull mantuvieron el nivel de las últimas citas, pero la polémica que ha afectado a sus pilotos continúa. El director deportivo, Horner, ha prometido igualdad y eso puede perjudicarles, como ya ocurrió en Turquía con sus dos pupilos chocando entre sí. Los otros favoritos, McLaren, no tuvieron ayer un buen día. Hamilton sólo pudo acabar séptimo después de sufrir una fuerte salida de pista. Rompió la suspensión trasera y los mecánicos la repararon deprisa y corriendo para disputar la segunda sesión. Las salidas de pista fueron frecuentes en ambas sesiones. Vettel y Webber realizaron varias excursiones y Alonso probó los límites del circuito y sus escapatorias. Logró el mejor registro, aunque de forma peculiar porque sólo dominó uno de los tres parciales en los que está dividido el circuito de Hockenheim, con una velocidad punta 5 km/h inferior a sus rivales. Una muestra más de que el F10 guarda alguna que otra décima. La sesión de clasificación se vislumbra muy igualada y si las previsiones del tiempo no fallan (alta amenaza de lluvia), la carrera puede convertirse en un caos. De la Rosa acabó 13º y Alguersuari, 18º, ambos por detrás de sus compañeros de equipo.