Salimos todos

Extravagante regalo el de LA RAZÓN. Habrá quien se pregunte qué hacer con un libro en cinco idiomas ¡en la época de internet! Yo le animo a abrirlo. Por la parte de la lengua que hable, claro. Si es usted una mujer liberal, pero defraudada por las promesas incumplidas, puede que le interese la historia de la samaritana: la atractiva mujer que iba por el cuarto (creo) marido y encontró en Jesús al hombre de su vida. Si gana usted una pasta, pero le queda cierta soledad en el fondo del corazón, busque la de Zaqueo. Un recaudador de impuestos forrado, claro, que después de montar un número para conseguir cenar con Cristo, cambia completamente su punto de vista sobre la importancia de la bolsa. Si está usted harto de meter la pata, si no hay culo que no deje de perseguir, ni lío en que no se meta, y aguanta además las críticas sociales, lea la historia de la adúltera, a la que el Señor defendió de los hipócritas.
En fin, si ama a Dios pero es incapaz de hacer una a derechas, reconfórtese con la historia de Pedro, el mentiroso que, fíjese, llegó a Papa. Hace mucho que no encuentro historias más reales que las que narran los Evangelios. En ellas salen Elizabeth Taylor y sus maridos; Amy Winehouse y sus demonios; Murdoch y sus miserias, y hasta Dominique Strauss-Kahn. Yo salgo todo el rato. A lo mejor le apetece comprobar personalmente si, en el ejemplar que regala el viernes este periódico, sale usted.